Homicidio

El asesinato de una niña en Lanús paraliza la campaña electoral en Argentina

El homicidio de la joven de 11 años Morena Domínguez a manos de dos asaltantes desata las reacciones de los precandidatos en la antesala de unos comicios clave

Morena Domínguez, la joven de 11 años asesinada en Lanús
Morena Domínguez, la joven de 11 años asesinada en LanúsRRSS

El crimen que ha conmocionado a la Argentina sucedió el miércoles a las 7.27 hora local. Dos asaltantes que circulaban en motocicleta por las calles de Lanús atracaron súbitamente a Morena Domínguez, una joven de 11 años que caminaba hacia la escuela. Las cámaras de seguridad grabaron la escena. Las imágenes muestran cómo los «motochorros», como son conocidos en la Argentina este tipo de delincuentes que utilizan sus motocicletas para cometer robos, atropellan y arrastran a la niña varios metros sobre el asfalto. Uno de ellos, que viaja como acompañante, baja del vehículo para recoger una a una las pertenencias de la joven. Aparece en ese momento una vecina que intenta asistir a la menor y un coche amaga con cerrar el paso a los asaltantes. Pero consiguen escapar a toda velocidad por la acera.

«Veo que una nena está colgada de una moto, luchando con la mochila. Tiro el auto encima, no para pegarle porque estaba la nena. Se suben arriba de la vereda y me apuntan con un revólver. No llegué a ver si tenían patente. Después volví y había otro señor que la ayudaba. No la vi desvanecida, la vi mareada. No vi si se cayó al piso. Cuando se cae, yo ya había pasado. Todos los días están robando acá», relata un testigo al diario La Nación.

La víctima sufrió un golpe en la cabeza cuando cayó al suelo. Politraumatismo craneoencefálico grave. Falleció de un paro cardiorrespiratorio en el Hospital Evita de Lanús, adonde fue trasladada. Morena Domínguez se quedó a escasos metros de entrar en el centro. «A través de la reanimación cardiopulmonar que se le hizo en la escuela y dentro de la ambulancia, se pudo mantener un mínimo latido cardiaco. Llegó inconsciente al hospital y se la trasladó a terapia intensiva pediátrica. A las 9.20 fallece, una hora y media después de arribar al nosocomio», trasladó a la prensa el director del hospital, Javier Maroni.

El homicidio ha paralizado la campaña electoral de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO, por sus siglas), los comicios que se celebrarán este domingo que a buen seguro marcarán el futuro del país. Son la antesala de las presidenciales de octubre. El precandidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires e intendente de Lanús, Néstor Grindetti, y el candidato a jefe comunal de ese municipio por la coalición opositora Juntos por el Cambio (JxC) y responsable de la seguridad local, Diego Kravetz, condenaron lo sucedido y decidieron suspender su agenda.

Ya hay culpables. Dos hermanos de apellido Madariaga, de 25 y 28 años. No hay menores de edad detenidos, según las filtraciones a la prensa de las autoridades. Pero los arrestos no alivian la tragedia. Los vecinos de Lanús, un municipio de la provincia de Buenos Aires con más de 460.000 habitantes, rodearon poco después la comisaría de Policía más próxima a la escuela en la que estudiaba Morena Domínguez al grito de «corruptos» y «justicia». El homicidio reavivó los llamados que más contundencia contra el crimen. Por eso, los candidatos que se juegan su futuro en las urnas han entrado en la refriega.

Patricia Bullrich, precandidata a presidenta de JxC y exministra de Seguridad con el expresidente Mauricio Macri, escribió en su cuenta de X: «Otra vez el dolor. Ahora con el asesinato de Morena, de 11 años. Todo mi acompañamiento y apoyo a la familia y amigos». En ese mismo mensaje, señaló al oficialismo: «No podemos seguir viviendo con tanta angustia y miedo. Esto no da para más. Transformaron a la Argentina en un país invivible».

Otro precandidato, el líder de la extrema derecha de La Libertad Avanza, Javier Milei, señaló en la misma red social que el homicidio «tiene un responsable muy claro: una clase política que hace décadas defiende un modelo de empobrecimiento y zaffaronismo que genera delincuentes sin ningún respeto por la vida».