Bruselas

Aviso a Londres del riesgo de una ruptura total

Michel Barnier, el negociador jefe de la UE, garantiza la unidad de los 27 frente a Reino Unido

La Razón
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Michel Barnier, el negociador jefe de la UE, garantiza la unidad de los 27 frente a Reino Unido

Dos días antes de que se active el Brexit, el negociador jefe de la UE, Michel Barnier, ha advertido a Londres de que tiene más que perder que el bloque europeo en caso de que las negociaciones desemboquen en un divorcio traumático, un alusión a las palabra de la premiere británica Theresa May que aseguró preferir una ruptura total antes que un mal acuerdo .

En un artículo publicado ayer en el rotativo británico Financial Times Barnier opina que este escenario de falta de acuerdo entre Londres y sus todavía socios Bruselas tendría "serias consecuencias para nuestros pueblos y nuestras economías. Sin duda dejará peor al Reino Unido". Mientras que a los 27 miembros la les resultará más fácil ajustarse puesto que seguirán beneficiándose del mercado único, la unión aduanera y más de sesenta acuerdos comerciales con socios internacionales, creemos que es de mejor interés que ambas partes alcancen un acuerdo sobre la retirada ordenada del Reino Unido de la UE", escribe el político francés en lo que supone una toma de posición de firmeza antes de que comience un proceso inédito y de resultado incierto en el club comunitario, que el pasado sábado conmemoró sus 60 años de Unión. Entre estas consecuencias negativas, Barnier enumera largas colas en el puerto inglés de Dover y problemas en el transporte aéreo, así como inconvenientes en las cadenas de suministro.

El representante del ejecutivo comunitario también aprovechó el texto escrito en la biblia económica británica para hacer gala de la unidad que presidirá las negociaciones. "Al final, el Reino Unido necesitará que la UE llegue conjuntamente a un convenio. La unidad de los 27 será más fuerte cuando esté basada en la plena transparencia y el debate público. No tenemos nada que ocultar".

Fuentes diplomáticas comunitarias reconocen que Reino Unido ya ha comenzado a intentar dividir a los socios europeos y, de ahí, ciertas informaciones apuntadas en la prensa británica que apuntan a diferentes estrategias de las capitales europeas con el objetivo, según estas fuentes, de crear fisuras en las cancillerías europeas antes de que comiencen las negociaciones. Entre los puntos que se abordarán en los primeros estadios de las negociaciones estarán los más polémicos: la situación de lo británicos residentes en RU y viceversa y la factura de salida. Uno de los principales temores consiste en que Londres acabe utilizando como rehenes a los ciudadanos comunitarios que viven en Reino Unido. Barnier, en ánimo conciliador, considera que lo más importante es proteger los derechos de los 4,5 millones de comunitarios que se encuentran ante un futuro "incierto", por lo que promete trabajar desde el principio a favor de resolver la situación de todos los afectados.

En cuanto a la cantidad que Londres deberá pagar debido a su portazo al club, el propio Jean-Claude Juncker confirmó hace unos días a la emisora BBC que la cantidad rondará las 50.000 libras, unos 60.000 euros- tal y como habían adelantado varios analistas internacionales. Dentro de esta cantidad, estarán incluido los compromisos suscritos con Londres en las perspectivas financieras europeas elaboradas cada siete años y los pensiones de los funcionarios comunitarios británicos que tras la salida de Reino Unido verán preservado su puesto en las instituciones europeas. Uno de los puntos de fricción reside en que Londres pretender pagar tan sólo las pensiones de los oficiales británicos mientras que la UE pretende dividir de manera equitativa la factura entre todos los funcionarios europeos independientemente de su nacionalidad.