Cameron advierte a los pensionistas de los riesgos del «Brexit»

El "premier"británico advierte de que una salida de la UE supondría un agujero en las cuentas públicas que pondría en peligro la sanidad pública y la revalorización de las pensiones

El "premier"David Cameron está en sus horas más bajas. Podría pasar a los libros de historia como el primer ministro que sacó a Reino Unido de la Unión Europea. A menos de dos semanas que tenga lugar el histórico referéndum, los sondeos dan ventaja a los euroescépticos. La inmigración sigue siendo el punto fuerte de la campaña por la salida del "club"comunitario, por lo que en la recta final, el líder "tory"ha decidido centrar su discurso en las consecuencias económicas que podría desencadenar el temido "Brexit". Y en esta línea, puso ayer especial énfasis en alertar a los pensionistas de los problemas que conllevaría el aislamiento de Europa. Según los sondeos, los mayores de 65 años son más partidarios del "Brexit", sobre todo los votantes conservadores.

“Ésta es la realidad: Si nos vamos [de la UE], las prestaciones a los pensionistas podrían estar amenazadas”, señaló el premier, para quien el compromiso de actualizar la paga a los jubilados al menos en un 2,5 % cada año podría ser imposible de mantener.

"Hicimos todo eso ante la expectativa de un crecimiento económico, pero si nos encontramos con un gran agujero negro podría costarnos justificar mantener durante más tiempo esa protección especial", advirtió.

"Incluso si la pudiéramos justificar moralmente, no sería posible mantenerla económicamente. Los pensionistas representan un porcentaje enorme del gasto público, más de 90.000 millones de libras (116.000 millones de euros) este año, y la previsión si dejamos Europa es que la inflación llegue al 4 %", afirmó el primer ministro.

Así mismo, sostuvo que el "Brexit"causaría un "agujero negro"en las finanzas británicas de hasta 40.000 millones de libras (51.600 millones de euros) en 2020. "En esas circunstancias, la financiación futura del sistema público de salud podría estar en riesgo", agregó durante un discurso en el que estuvo acompañado de su mano derecha, el responsable del Tesoro, George Osborne.

Éste último, que se perfila como uno de los favoritos para sucederle como líder del Partido Conservador, advirtió por su parte que romper con Bruselas llevaría a "una nueva dosis de austeridad"y "más años de recortes en el gasto público". Ante los temores sobre la amenaza terrorista, Osborne detalló también que el presupuesto de Defensa "debería ser recortado entre 1.000 y 1.500 millones de libras (de 1.290 a 1.935 millones de euros)".

En los últimos días, diversas encuestas han encendido las alarmas en el campo partidario de seguir en la Unión. La más preocupante, sin duda, la publicada el fin de semana por "The Independent", que pronostica una victoria por hasta diez puntos de los partidarios de abandonar la comunidad de los Veintiocho (55% de los votos frente al 45%). El sondeo, elaborado por la firma ORB a partir de las respuestas de 2.000 personas, subraya que el 70% de los jóvenes entre 18 y 24 años son favorables a Europa, mientras que la mayoría de los mayores de 55 años -el 64%- quieren abandonar la Unión.

Por su parte, "The Sunday Times"publicó ayer otro sondeo donde el 43% de los encuestados apoyaba el "Brexit", frente al 42% que abogaba por la unión. El resto permanecía aún indeciso.

El líder del eurófobo Partido por la Independencia de Reino Unido (UKIP), Nigel Farage, afirmó que la situación "ha dado un giro en los últimos quince días". "La gente se ha cansado de las amenazas del primer ministro y el ministro de Economía. Colectivamente, los ciudadanos han comenzado a hacerle un corte de mangas a la clase política", dijo durante una entrevista a la BBC. Según la consultora Absolute Strategy Research, en caso de divorcio con Bruselas, la libra podría caer un 30 %, hasta acercarse a la paridad con el dólar estadounidense, y la bolsa podría llegar a caer un 20%.