Carlos Molina Tamayo: «Existe un riesgo real de una transición caótica»

El ex almirante de la Armada Nacional de Venezuela, Carlos Molina Tamayo, se encuentra exiliado desde que en 2002 participó en el golpe que intentó poner fin a la presidencia del venezolano Hugo Chávez. Feroz opositor del régimen chavista, Molina analiza para LA RAZÓN la situación a la que se puede enfrenta Venezuela tras los comicios de mañana que podrían dar portazo a 17 años de revolución bolivariana.

–Ante la esperada victoria de la oposición, Maduro ha insinuado que podría sacar las tropas a la calle. ¿Qué papel podría tener el Ejército tras los resultados electorales?

–Los oficiales y suboficiales de las Fuerzas Armadas son venezolanos como cualquier otro y sufren la mismas vicisitudes que el resto. Los cuadros medios y subalternos están totalmente desilusionados con ese Gobierno de corte «comunistoide» que tenemos. Los generales y almirantes, evidentemente, están comprados y viviendo con sus dólares. Están con Diosdado Cabello, con la corrupción, con el narcotráfico... y esos podrían obedecer una orden inconstitucional e inmoral de Maduro, pero los cuadros medios y subalternos van a respetar la institucionalidad.

–¿Cómo puede reaccionar la facción militar más oficialista tras la esperada debacle del chavismo? ¿Podría producirse un golpe militar?

–No, porque no son suficientes en número. Son tan sólo los altos mandos militares de cada una de las fuerzas, pero evidentemente que la mayoría de las Fuerzas Armadas y los cargos de coronel para abajo y suboficiales y sargentos, etcétera, no van a seguir una acción de locura si Maduro la enviara. Y muchos de estos generales probablemente tampoco lo seguirían porque tienen muchos millones de dólares que perder y no quieren verse envueltos en crímenes de lesa humanidad como ha sucedido.

–Los militares tendrán un papel clave en la transición política tras los comicios. Sin embargo, ¿cree que se tratará de un proceso pacífico? ¿Cuál será el futuro de los grupos paramilitares?

–Hay muchos riesgos de caos y violencia, si bien no de las Fuerzas Armadas, pero sí de estos grupos perversos que tienen armados Maduro y su gente. Yo diría que no son ni paramilitares, sino delincuentes armados. Desde que está el chavismo instalado en Venezuela, han asesinado a mucha gente inocente en la sociedad civil. Cuando salga Maduro, un Gobierno de transición tendrá que enfrentarse al problema que presenta desarmar a estos grupos terroristas, que tienen armas de alto precisión.

–¿Cómo pueden reaccionar los simpatizantes civiles del chavismo a la debacle del oficialismo? ¿Puede Venezuela volver a partirse en dos?

–El país está dividido ya, pero no en dos, sino en un 80% y 20% de chavistas, que a su vez están divididos en un 1 o 2% de chavistas duros y el resto son gente de la calle que están engañados por la idea del socialismo del siglo XXI.Y lo que está planteando la oposición es que el chavismo sacó lo peor de los venezolanos así como Hitler sacó lo peor de los alemanes en la Segunda Guerra Mundial.

-¿Siente que Venezuela está recibiendo el suficiente respaldo internacional con estos comicios?

-Sentimos que Venezuela estuvo abandonada especialmente por la madre patria, por España, durante los años de Zapatero. El PSOE se convirtió en un aliado del chavismo cuando el PSOE olvida que en el periodo de la Transición, Carlos Andrés Pérez, que es el PSOE venezolano, Acción Democrática, ayudó mucho política y económicamente. Como venezolanos, estamos muy desilusionados por la actitud que tuvo (el PSOE) de cómplice con el Gobierno de Chávez y agraciados con la actitud del presidente Rajoy y el ministro Margallo, que han tenido una posición dura y democrática como debe ser. Ahora tenemos apoyo de muchos países y también la elección presidencial del señor Macri en Argentina provoca un efecto de simpatía en nuestros votantes, diciendo que sí se puede salir del desastre de los gobiernos de izquierda que han invadido Latinoamérica durante los últimos años.