Ataque yihadista en Francia
Cinturones, explosivos y una huella de Salah Abdeslam en un piso de Bruselas
Las investigaciones tras los atentados de París siguen arrojando pistas en Bruselas.
Las investigaciones tras los atentados de París siguen arrojando pistas en Bruselas. La Policía encontró una huella dactilar de Salah Abdeslam en un piso en el que aparecieron restos de explosivos similares a los utilizados en París, además de tres cinturones fabricados a mano. El apartamento, situado en la comuna de Schaerbeek, podría haber servido de taller para elaborar los explosivos que acabaron con la vida de 130 personas el 13-N y de refugio para el único terrorista que no llegó a inmolarse.
Schaerbeek es otra comuna con mayoría de población marroquí y turca, similar a la vecina Molenbeek, La calle Henri Bergé se llenaba ayer de prensa para fotografiar el lugar al que llevaba la última información confirmada por la Fiscalía belga. Fue el pasado 9 de diciembre cuando se descubrió el apartamento con los explosivos pero hasta ayer viernes no trascendió a la prensa. Sin embargo, los vecinos mostraron cierto asombro con la noticia por no recordar una redada en la calle por esas fechas.
«La Fiscalía confirma el descubrimiento de material destinado a la preparación de explosivos, así como restos de peróxido de acetona, un explosivo que se ha utilizado para hacer estallar los cinturones en los atentados del 13 de Noviembre. También se hallaron tres cinturones en el apartamento hechos a mano que podrían haber servido para transportar los explosivos, además de una huella dactilar de Salah Abdeslam, aún en búsqueda y captura», señalaba en una nota.
El apartamento había sido alquilado con una identidad falsa, que podría haber sido utilizada por una de las personas que ahora está bajo arresto en Bruselas. Son diez personas las acusadas por terrorismo, nueve de las cuales aún están en detención preventiva. Todos ellos son sospechosos de haber ayudado a Salah Abdeslam o de haber participado en la preparación de los atentados de París.
La huella de Salah Abdeslam podría ser anterior o posterior a los atentados. Según avanzaba a AFP el portavoz de la Fiscalía, Eric Van Der Sypt, no hay certeza de que haya sido posterior al 13-N, aunque hay testigos que vieron el sábado 14 de noviembre a Abdeslam en una calle de la comuna de Schaerbeek. Las investigaciones continúan para determinarlo y por otra parte, intentar dar con los contactos telefónicos que desde Bruselas habrían dado las órdenes a los terroristas en París.
La lucha contra el yihadismo ha llevado a Bélgica a decretar la alerta máxima por alerta terrorista en el último trimestre del año en dos ocasiones. A este respecto, el fiscal general, Frédéric Van Leeuw, reconocía ante el Parlamento belga que el país tiene que aprender a vivir con la lucha contra el terrorismo como otros países europeos también lo han hecho. «Nunca habíamos estado enfrentados a este tipo de criminalidad, con gente entrenada militarmente. Tenemos que vivir como Gran Bretaña o España han vivido con el IRA o ETA», declaraba ante una comisión de la Cámara.
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