Venezuela

El chavismo aplaza el revocatorio hasta 2017

La recogida del 20% de firmas será a finales de octubre, lo que impediría celebrar este año el referéndum para apear a Maduro

El ex candidato Henrique Capriles saluda a un grupo de venezolanos esperando en una larga fila, ayer
El ex candidato Henrique Capriles saluda a un grupo de venezolanos esperando en una larga fila, ayerlarazon

La recogida del 20% de firmas será a finales de octubre, lo que impediría celebrar este año el referéndum para apear a Maduro

Se acercan días de furia en las calles de Venezuela. Como se esperaba, el Consejo Nacional Electoral (CNE) volvió a postrarse a los deseos chavistas y retrasó hasta el año que viene el proceso que promueve el referéndum revocatorio para sacar al presidente Nicolás Maduro. Según la Constitución venezolana, si el proceso se celebra antes del final de 2016 habría nuevas elecciones, sin embargo si se celebra el próximo año, Maduro podría abandonar el Palacio de Miraflores pero su Gobierno terminaría el mandato.

La presidenta del CNE, Tibisay Lucena, informó ayer de que el referéndum se realizará en 2017: «Si se cumplen todos los requisitos que exige la norma, la recolección del 20% se llevaría a cabo a finales de octubre». Según el cronograma electoral, éste se efectuaría después del primer trimestre del próximo año, de acuerdo a lo que precisó en rueda de prensa desde la sede del poder electoral. Lucena aseguró que los plazos de los procesos no se pueden vulnerar y aseguró que conllevan una cantidad enorme de procesos que son las garantías de ese proceso.

«A veces se nos olvida que hemos tenido otros referéndums revocatorios (...) Tuvimos diez en 2007 a nivel municipal», expresó Lucena, quien presentó un informe descriptivo sobre las bases de los procesos revocatorios. «El Consejo Nacional Electoral tiene la obligación y el mandato constitucional de garantizar los derechos de todos (...) y además de eso tiene como mandato constitucional garantizar que todos esos procesos se lleven de acuerdo a la norma, (...) porque todos los venezolanos están en derecho de vivir en democracia y de vivir en paz», dijo. «Hemos visto a lo largo de los meses que estamos viviendo en un contexto político de confrontación, estamos viendo situaciones complejas, (...) momentos de confrontación política en donde en algunas ocasiones y algunos actores políticos buscan a través de la tergiversación de las normas supuestos desconocimientos o tergiversación de la aplicación de las normas la demolición de la autoridad electoral», expresó.

La oposición en Venezuela se movilizará en Caracas el próximo 1 de septiembre. El ex candidato presidencial Henrique Capriles explicó que esta actividad consistirá en una «gran marcha» para movilizar a los opositores del interior del país hasta la capital venezolana para presionar a las autoridades a dar una nueva respuesta sobre la solicitud del referéndum. Afirmó que, incluso si se recolecta las firmas de 20% en octubre, hay tiempo para que el revocatorio sea este año. «Esto es técnicamente correcto. Dependerá de la presión política». Tras un retraso que ya suma 70 días habría que sumar un mes más para validar esas firmas antes de elegir la fecha referéndum, que se llevaría a cabo dentro de los 90 días continuos. Por tanto la votación se organizaría entre el mes de diciembre y la segunda quincena de febrero de 2017.

Por su parte, el diputado a la Asamblea Nacional Juan Andrés Mejía hizo un llamado a realizar protestas en todo el país «de aquí al 1 de septiembre», después de las declaraciones de Lucena. «Se equivoca el Gobierno si piensa que nos vamos a quedar de brazos cruzados. Ahora vamos con más fuerza. El cambio viene y nada lo detiene», aseguró el parlamentario. En sintonía, el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús «Chuo» Torrealba, aseguró que en 2016 sí va a haber referéndum revocatorio contra Nicolás Maduro y aseguró que la movilización denominada «la toma de Caracas» se realizará para exigir la fecha para la recolección del 20% de voluntades. «El referendo está en manos de la gente... Nos pongan donde nos pongan, vamos a arrasar, va a ser superior al ‘‘firmazo’’ y a la validación de junio. Vamos a activar una nueva realidad política», expresó.

Caída en picado de Maduro

Este martes se conoció que la aprobación a la gestión de Maduro cayó en mayo del corriente año a un 23,3%, su peor nivel en poco más de seis meses, según una encuesta de la empresa venezolana Datanálisis. En octubre de 2015, la aprobación del heredero político del fallecido presidente Hugo Chávez tocó mínimos de 21,1%. A partir de allí repuntó hasta 33,1% en febrero, para volver a caer desde marzo. Además, 73,4% de los encuestados coincide en que Maduro debería ser removido este año por un referéndum revocatorio y sólo un 23% sostiene que debería permanecer hasta principios de 2019 cuando termina su mandato.