En el lado correcto de la Historia

Merkel y Macron engrasan el eje franco-alemán a propósito del clima y apuestan por aumentar el liderazgo europeo en la escena internacional.

La protección del clima es primordial para Angela Merkel. No en vano, la canciller fue ministra de medio ambiente durante el Gobierno de Helmut Kohl y ya es un habitual que la dirigente se decante por la naturaleza para disfrutar de sus descansos. Una circunstancia que junto a su más que obvio distanciamiento con Trump, le llevó ayer a mostrarse firme y totalmente convencida en tomar el liderazgo en la defensa del Acuerdo de París. «Es una decisión muy lamentable, y me expreso de manera muy contenida», manifestó la canciller en una comparecencia ante los medios en la Cancillería en la que asimismo garantizó que Alemania, Europa y el mundo unirán sus fuerzas, «más determinados que nunca», para afrontar el reto. En esta línea, Merkel consideró que es el momento de «mirar hacia delante» y reiteró que su país cumplirá con todos los compromisos adquiridos en un acuerdo que es «imprescindible» para alcanzar las metas de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible.

El Acuerdo de París, apuntó, sigue siendo un «pilar» de la cooperación internacional, es necesario para «proteger la creación y nada puede ni debe pararlo». Unas palabras que agudizan aún más si cabe su distanciamiento con el gobierno de Trump pero con las que, por otro lado, quiere alcanzar mejores acuerdos con otros países. En este contexto, la canciller se mostró «conmovida e impresionada» por tantos grupos, países y empresas que han manifestado su deseo de continuar en la senda emprendida. «Iremos juntos», manifestó Merkel para recordar que Alemania acoge en noviembre la próxima conferencia mundial del clima donde ya acordó con el presidente francés, Emmanuelle Macron, dar nuevos pasos para la aplicación de ese acuerdo.

El francés se apresuró a denunciar la «falta» que comete Trump, y lo hizo en su idioma y en inglés, para dejar el mensaje claro. A diferencia de Merkel, el presidente de la República francesa fue el más optimista tras el G7. Macron dijo que estaba convencido de que había habido «un progreso», y de que Trump, en tanto que hombre «pragmático» confirmaría «su compromiso».

Pero Trump le ha dejado sin argumentos. Nada más producirse, Macron hizo una doble declaración para lamentarlo: «no es el futuro que nosotros queremos para nosotros, nuestros hijos y el mundo», y para dirigirse en directo al pueblo americano y decirle que «Francia cree en vosotros, el mundo cree en vosotros».

Macron hizo suya una frase del antiguo secretario general de la ONU que durante su mandato insistió en que «no hay plan B porque no hay planeta B». Y se marcó un tanto en las redes sociales al apropiarse del slogan de Trump para pedir «Make our planet great again». Hizo una llamada a los científicos americanos que se sientan decepcionados : «Venid a Francia a trabajar con nosotros . Ésta es vuestra segunda patria».