Donald Trump
Un experto asegura que el deterioro psicológico de Donald Trump es inminente: estos son sus argumentos
Los signos de deterioro neurológico son preocupantes, según afirma
La salud mental del presidente estadounidense Donald Trump se ha convertido en un tema de intenso debate académico. Varios profesionales de la psicología están manifestando preocupaciones significativas sobre su capacidad cognitiva actual, ya que con 79 años, los especialistas consideran que Trump está exhibiendo señales potenciales de un progresivo deterioro neurológico que podría agravarse con el tiempo.
Expertos como John Gartner, exprofesor asistente de psiquiatría en la Universidad Johns Hopkins, han observado cambios notables en la comunicación de Trump. Gartner, fundador de Duty to Warn, una organización de profesionales de salud mental, ha identificado una deterioración evidente en su capacidad expresiva comparada con años anteriores.
La principal preocupación radica en la dificultad de Trump para completar sus pensamientos durante discursos públicos. Gartner ha señalado que si se comparan grabaciones de la década de 1980, Trump era extraordinariamente articulado mientras que, actualmente, experimenta problemas para concluir ideas coherentemente.
Harry Segal, profesor de psicología en Cornell, ha detectado patrones comunicativos inquietantes. Destaca cambios abruptos de tema y un fenómeno conocido como confabulación, donde se mezclan recuerdos reales con elementos ficticios, lo cual puede ser indicativo de alteraciones cognitivas.
Incluso Grok parece estar de acuerdo con su estado de deterioro
Curiosamente, incluso el asistente virtual de Elon Musk, Grok, ha sugerido posibles síntomas de deterioro, mencionando problemas de marcha, incoherencia y errores lingüísticos frecuentes.
Por su parte, el doctor Sean Conley, médico de la Casa Blanca, ha declarado que Trump presenta "excelente salud cognitiva". Sin embargo, profesionales independientes cuestionan la profundidad de estas evaluaciones, señalando que pruebas como el Montreal Cognitive Assessment son demasiado simples para detectar deterioros sutiles.
Además, un elemento adicional de análisis es el contexto genético. Se conoce que su padre, Fred Trump, padeció demencia senil leve, lo que podría representar un factor hereditario significativo en la potencial condición neurológica de Donald Trump.
De momento, la divergencia entre las evaluaciones oficiales y las observaciones académicas genera un panorama complejo. Mientras el equipo médico de Trump mantiene su aptitud mental, un número creciente de expertos advierte sobre signos preocupantes que podrían indicar un deterioro cognitivo progresivo.