Israel en guerra

Israel anuncia una «guerra en tres fases» sobre la Franja de Gaza

El Ejército israelí asegura que entre los secuestrados por Hamás hay 30 menores de edad y unos 20 ancianos

Israeli soldiers work on a tank at a staging area near the border with the Gaza Strip, in southern Israel Friday, Oct. 20, 2023. (AP Photo/Ohad Zwigenberg)
Israel PalestiniansASSOCIATED PRESSAgencia AP

Los esperados camiones con la muy necesaria ayuda humanitaria para la Franja de Gaza siguen detenidos en el lado egipcio del paso de Rafah, donde el secretario general de la ONU, António Guterres, realizó una visita relámpago y aseguró tener «el corazón roto», porque «estamos siendo testigos de una paradoja: detrás de estos muros, tenemos a 2 millones de personas que sufren enormemente: no tienen agua, ni alimentos, ni medicinas, ni combustible. Y, de este lado, hemos visto tantos camiones cargados con agua, combustible, medicinas, alimentos... exactamente las mismas cosas que se necesitan», explicó.

El alto representante de la ONU volvió a exigir un alto el fuego, aunque dejó claro que la ayuda no debería estar sujeta a esa condición. Mientras, los tres países que la acordaron, Estados Unidos, Israel y Egipto, volvieron a asegurar que esta podrá llegar en el día de hoy; pero no hay garantías. De hecho, el pasado miércoles el presidente norteamericano, Joe Biden, ya dijo que el Gobierno egipcio permitiría la entrada de «hasta 20 camiones», de los más de 200 que esperan, pero esa promesa no se cumplió y la desesperación de cientos de miles de inocentes sigue creciendo.

Por otro lado, el Washington Post citó a fuentes dentro de Gaza que aseguraron que, cuando llegue, la distribución de la ayuda será «extremadamente peligrosa para ellos si los ataques aéreos israelíes no se detienen», los cuales continuaron tanto en el norte, donde se cree se concentran la mayoría de los milicianos de Hamás, como en el sur, donde Tel Aviv prometió ni iba a bombardear. Durante las últimas 24 horas «352 palestinos han muerto y 669 resultaron heridos», según informó el portavoz del ministerio de Salud gazatí, Ashraf al-Qudra, con lo que ya son 4137 los civiles muertos en Gaza, así como más de 12.000 heridos.

Desde el punto de vista de Israel, «el principal punto conflictivo han sido los problemas logísticos en curso y la verificación de que la ayuda no caerá en manos de Hamás», según informó un funcionario del Gobierno. Por su parte, el portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores egipcio, Ahmed Abu Zeid, acusó directamente a Israel de la demora por «los ataques selectivos» que están llevando a cabo en el interior de la Franja. «El cruce de Rafah está abierto y Egipto no es responsable de obstruirlo», añadió, después de un día de manifestaciones masivas en el país de las pirámides exigiendo que la ayuda llegue de inmediato. Asimismo, y en cuanto a las verificaciones, Guterres indicó que «deben ser efectivas y, al mismo tiempo, deben realizarse de manera práctica y acelerada».

Mientras, en Gaza los bombardeos no cesan y van en aumento después de que el portavoz militar israelí, el contralmirante Daniel Hagari, asegurara que los aviones de la Fuerza Aérea han estado castigando la Franja «a un ritmo no visto en décadas». Además, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, informó que las operaciones futuras de su Ejército se desarrollarán en tres fases con ataques aéreos y maniobras terrestres para, luego, acabar con los milicianos de Hamás dentro de la Franja. No obstante, hizo hincapié en que, una vez terminado el conflicto, Israel ya no tendrá la «responsabilidad de la vida en Gaza», descartando así una ocupación permanente.

En cuanto a las personas secuestradas por Hamás durante la operación terrorista del sábado pasado, el Tsahal informó que, entre los más de 200 rehenes, se encuentran alrededor de 30 menores de 16 años. Más aún, apostillaron que también hay entre 10 y 20 personas de más de 60 años. El Ejército israelí creen que la mayoría de ellos están vivos, pero también admiten que los milicianos islamistas se llevaron consigo un número indeterminado de cadáveres, los cuales también esperan usar como moneda de cambio para liberar a 6.000 palestinos cumpliendo condena en las cárceles de Israel.

A propósito de los secuestrados de hasta nueve nacionalidades diferentes, Hamás indicó que serán puestos en libertad cuando sea posible. «Los prisioneros extranjeros son nuestros invitados y serán puestos en libertad cuando las condiciones lo permitan. Instamos a todos los países del mundo a advertir a sus compatriotas que no participen en el Ejército enemigo», según amenazó el portavoz de las Brigadas Ezedin al Qassam, el brazo armado del grupo, Abu Obeida. Además, no fue capaz de ofrecer un número real de la cantidad de cautivos porque hay «dificultades prácticas y de seguridad», dando la cifra de unos 200 en sus manos y otros 50 en las de «otras facciones de la resistencia».