La aparición mediática de Bagdhadi, un golpe para las pretensiones "anexionistas"de Al Qaeda

La estrategia que seguía Al Qaeda Central para atraer a sus filas a los “desencantados” de Daesh, se ha topado, por la lentitud de la maquinaria que fundara Osama Ben Laden, con la reacción, “rápida y efectiva” del Estado Islámico por medio de la difusión del segundo vídeo conocido de Abu Bakr al-Bagdhadi.

La estrategia que seguía Al Qaeda Central (AQC), con Ayman al Zawahiri a la cabeza, para atraer a sus filas a los “desencantados” de Daesh, se ha topado, por la lentitud de la maquinaria que fundara Osama Ben Laden, con la reacción, “rápida y efectiva” del Estado Islámico por medio de la difusión del segundo vídeo conocido de Abu Bakr al-Bagdhadi.

No es casualidad, que entre las felicitaciones que este individuo realizaba a sus distintas “wilayas” (provincias), por el terrorismo que desarrollan, concediera especial importancia a la que dirige Abu Al-Waleed. Al-Sahrawi, el Estado Islámico del Gran Sáhara. El Sahel es una de las zonas del mundo donde Al Qaeda tiene más fuerza a través del JNIM, una organización para la defensa del Islam y de los musulmanes, que agrupa a varias bandas yihadistas, entre ellas la franquicia del Magreb Islámico (AQMI).

Bagdhadi parece decidido a potenciar su presencia en esa zona y recibió con entusiasmo la promesa de lealtad de “los combatientes en Burkina Faso y Mali. Bendecimos su promesa de unirse al Califato y le pedimos a Alá que los proteja, que intensifiquen sus ataques contra Francia (presente a través de la operación Barkhane) cruzada y sus aliados y venguen a sus hermanos en Irak y Siria".

Que Daesh no había sido derrotado con la recuperación de los terrenos que conquistó a partir de 2014, era un hecho, porque se sabía que iban a practicar la guerra subversiva, el terrorismo. Pero el golpe de efecto de Bagdhadi ha supuesto un antes y un después. De momento, hoy se ha conocido que una nueva “wilaya” se une al “califato” desde Tailandia, país en el que hay muchos retornados de Iraq y Siria. No se debe olvidar, por otra parte, que las facciones yihadistas que operan en el Sahel son las que pueden atacar con más facilidad a los países del norte de África y el sur de Europa, entre ellos España.

La larga lista de elogios a sus “miujahidines” en Argelia, Sudán, Sri Lanka, Libia, Arabia Saudí, etcétera, demuestra que Bagdhadi reafirma el control de toda la organización criminal y lanza, de paso, un mensaje a su “rival” Al Qaeda para que que no “hurgue en las heridas”.

También es llamativo que citara por su nombre a todos los jefes de brigada que murieron en la defensa del último bastión de Baghouz, entre ellos a los hermanos franceses Fabien y Othman Clain, relacionados con los atentados de París del 13 noviembre de 2015.

Bagdhadi ha movido ficha mientras Al Qaeda que, según algunos expertos, lleva tiempo preparando un gran atentado (como los del 11S en EE UU o el 11M en Madrid), se ha quedado con un “palmo de narices”; y le ha hecho perder protagonismo, lo que, sin duda, la convierte en más peligrosa. Quizás este episodio suponga la destitución de Zawahiri al frente del Majilis al Shura, y el nombramiento de Abu Hamza, uno de los hijos de Osama Ben Laden para mandar la organización criminal.