Política

El Cairo

La intervención militar en el Sinaí, más cerca tras los últimos ataques

La Razón
La RazónLa Razón

Dos personas murieron ayer y seis resultaron heridas tras un ataque de los yihadistas a un puesto de vigilancia de las Fuerzas de Seguridad egipcias en la región central del Sinaí. Durante la madrugada del martes al miércoles, un grupo de asaltantes disparó con lanzagranadas y ametralladoras pesadas contra un camión en Sadr el Heitan, causando la muerte de un civil de 27 años y otra persona cuya identidad no ha sido todavía revelada. Al mismo tiempo, otro grupo armado que no ha reclamado la autoría disparaba contra otro puesto de vigilancia próximo al aeropuerto de Al Arish, en el norte del Sinaí. Pese a que las Fuerzas de Seguridad respondieron al ataque, no se informó de víctimas en ninguno de los dos bandos.

La situación de inestabilidad que vive la península desde 2011 se ha visto agravada desde el derrocamiento de Mursi, y en El Cairo ya hay algunas voces que hablan de una próxima operación militar en el Sinaí, aunque por el momento los rumores no han sido confirmados.

La violencia de estos días se suma a otros ataques ocurridos en la frontera con Gaza. Ayer mismo, se registraba otra agresión de los insurgentes contra el campamento de las Fuerzas Centrales de Seguridad en Rafá, aunque tampoco hubo ninguna víctima. Esta situación de inestabilidad en toda la península ha afectado al paso fronterizo de Rafá, que lleva cerrado por las autoridades egipcias desde el viernes pasado. Ayer, el Gobierno interino aceptó que el paso fuera abierto de manera excepcional durante cuatro horas para permitir el regreso de los palestinos que permanecían en Egipto durante el golpe y la salida de las personas que llevaban cinco días encerradas en la Franja. Según el viceministro de Exteriores de Gaza, Ghazi Hamad (miembro de Hamás, el partido en el poder en la Franja), tan sólo los enfermos que necesiten tratamiento médico y las personas en posesión de un pasaporte extranjero podrán cruzar hacia Egipto.

Es un frente más que se abre al Gobierno interino, que al mismo tiempo se ha manifestado en contra de las reacciones críticas de algunos de sus países vecinos ante el cambio político en el país. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Badr Badelaati, ha hablado del «gran pesar» por las «continuadas declaraciones de responsables iraníes, que demuestran una falta de conocimiento preciso sobre la naturaleza de la evolución democrática que vive Egipto.» Para el portavoz, las declaraciones de Teherán suponen «una injerencia inaceptable en los asuntos internos egipcios», por lo que le ha instado a centrarse en sus propios problemas internos.