Elecciones europeas

Von der Leyen emprende una campaña electoral personalista para asegurar su segundo mandato

La presidenta de la Comisión Europea defiende su gestión en el primer debate con el resto de fuerzas políticas europeas

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der LeyenEuropa Press

En política, a veces unos meses son una eternidad. El mejor ejemplo es el de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Si cuando presentó su candidatura en el mes de febrero, su segundo mandato al frente del Ejecutivo comunitario parecía casi seguro, ahora muchos nubarrones se ciernen sobre el horizonte y los pasillos comunitarios son un hervidero de rumores malintencionados en vísperas de las elecciones europeas del 9 de junio.

La campaña electoral que parecía pan comido hasta hace poco, ya no será un camino de rosas y von der Leyen ha decidido poner toda la carne en el asador, en una estrategia personalista en la que quiere destacar sus logros de los últimos años. El eslogan elegido ha sido “Más que una Unión. Nuestra casa” con imágenes de la candidata con las palabras “Ursula 2024” .

El pistoletazo de la campaña electoral se ha producido este lunes con un debate con el resto de los candidatos de las fuerzas políticas que concurren a la Eurocámara, aunque ninguno de ellos tiene ninguna opción de desbancar a la alemana ya que el presidente francés, Emmanuel Macron, ha boicoteado cualquier intento de un proceso de "spizkenkandidaten", (cabeza del lista por su traducción en alemán) como el que acabó llevado al Ejecutivo comunitario a Jean Claude Juncker y tampoco los conservadores y reformistas han propuesto un candidato.

En 2019, el candidato del Partido Popular Europeo, Manfred Weber, fue vetado por Macron, lo que propició la candidatura in extremis de Von der Leyen. Ahora los rumores apuntan a un aspirante que se imponga en el último momento apoyado por Francia e Italia y se barajan los nombres del ex presidente del BCE, Mario Draghi, la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, o el comisario de Mercado Interior, Thierry Breton. Aunque von der Leyen consiga la luz verde de las capitales, deberá también recibir el apoyo de la mayoría de la Eurocámara y en 2019 consiguió imponerse tan sólo por nueve votos.

Los socialistas, aunque formalmente tienen un aspirante, han elegido a prácticamente un desconocido fuera de la burbuja comunitaria, Nicolas Schmit, comisario europeo de Empleo y Derechos sociales, ya que no querían quemar a una figura de enjundia.

En los últimos meses, Von de Leyen se ha adentrado en un terreno peligroso. En su partido no ha gustado su programa ecologista y social más propio de socialistas y verdes y, a estos últimos, les ha molestado que en el último momento haya dado marcha atrás en ciertas medidas para granjearse el apoyo de los agricultores encolerizados por la política medioambiental europea.

A pesar de esto, Von der Leyen ha afrontado el debate casi sin despeinarse. El encorsetado formato con preguntas de los presentadores y el gran número de participantes dejaba poco margen de maniobra para los enfrentamientos directos. Las invectivas más duras han llegado desde la extrema derecha que ha prometido “drenar el pantano” de la política europea, lo que incluye relevar de su puesto a la política alemana que ha defendido que el Pacto Verde es “la solución para la competitividad de la economía europea” y ha defendido a los agricultores como parte también de la solución para luchar contra el cambio climático. Cuando la discusión sobre cambio climático alcanzaba el punto álgido, el debate ha pasado a abordar la defensa y seguridad europea, un terreno que parece la gran apuesta de von der Leyen de cara a su segundo mandato y que ha contado con intervenciones más vivas. “Si se quiere terminar con esta guerra, Putin debe dejar de luchar”, ha asegurado la alemana que ha acusado a la ultraderecha de estar siendo financiada por el mandatario ruso. En cuanto a Israel, se ha pronunciado en contra de la invasión de Rafah, pero no ha querido confirmar si la Comisión Europea propondrá sanciones si Netanyahu da este paso.

En el debate celebrado en la ciudad holandesa de Maastricht, organizado conjuntamente por Politico Europe y Studio Europa, también han participado Marie- Agnes Strack- Zimmerman (Partido de la Alianza de Liberales y Demócratas por Europa), Bas Eickhout (Partido Verde Europeo), Anders Vistisen (Partido de la Identidad y la Democracia), Walter Baier (Partido de la Izquierda Europea), Maylis RobBger Maylis(Alianza Libre Europea) y Valeriu Ghilețchi (Movimiento Político Cristiano Europeo).

Tras este debate, la presidenta se ha embarcará en una gira internacional en la que recalará en Praga, Katowice e Italia. Se espera que visite el mayor número de países posible.