Alemania

La tragedia de la Loveparade en la que murieron 21 personas no irá a juicio

Entre los fallecidos se encontraban las españolas Clara Zapater y Marta Acosta, dos estudiantes de Erasmus de 22 años en la Universidad de Münster

Fotografía de archivo fechada el 24 de julio de 2010 que muestra a varias personas mientras intentan abandonar un túnel durante una estampida en la tragedia de la Loveparade de 2010, en Duisburgo
Fotografía de archivo fechada el 24 de julio de 2010 que muestra a varias personas mientras intentan abandonar un túnel durante una estampida en la tragedia de la Loveparade de 2010, en Duisburgolarazon

La Audiencia Provincial de Duisburgo (oeste de Alemania) descartó hoy la apertura de un proceso penal por la tragedia de la Loveparade de 2010, cuando murieron 21 jóvenes aplastados entre la multitud, entre ellos dos estudiantes españolas.

La Audiencia Provincial de Duisburgo (oeste de Alemania) descartó hoy la apertura de un proceso penal por la tragedia de la Loveparade de 2010, cuando murieron 21 jóvenes aplastados entre la multitud, entre ellos dos estudiantes españolas.

El juzgado informó hoy de que no se abrirá juicio contra los diez acusados por la Fiscalía, seis empleados de la administración local de Duisburgo y cuatro responsables de la empresa que organizó el multitudinario festival tecno, contra los que se presentaron cargos por homicidio imprudente y lesiones imprudentes.

Según el juzgado, tras estudiar las pruebas presentadas no hay indicios suficientes para sustentar y confirmar las acusaciones, por lo que no se puede esperar una condena de los acusados.

Tanto la Fiscalía como las acusaciones particulares pueden apelar ahora ante la Audiencia Territorial de Düsseldorf.

La Fiscalía presentó su acusación en 2014, tras más de tres años y medio de investigaciones, y determinó que hubo fallos tanto en la planificación del festival como en las medidas de seguridad.

A su juicio, los responsables debían haber sabido que la estrechez de las vías de entrada al lugar, que también eran de salida, podían poner en riesgo la vida de los 445.000 asistentes, por lo que el evento nunca debería haber sido autorizado.

La tragedia de la Loveparade, festival que no ha vuelto a celebrarse, tuvo lugar el 24 de julio de 2010, cuando se registró una avalancha en el túnel que servía de acceso y salida al recinto elegido para el evento.

Murieron 21 asistentes y más de seiscientas personas resultaron heridas, un drama que conmocionó al país y que tuvo una dimensión global por las diversas nacionalidades de las víctimas: alemanas, españolas, holandesas, australianas, italianas y chinas.

Entre los fallecidos se encontraban las españolas Clara Zapater y Marta Acosta, dos estudiantes de Erasmus de 22 años en la Universidad de Münster que habían acudido al festival para celebrar el fin de curso.

La larga investigación de lo sucedido impulsó las quejas de los familiares y de las víctimas, que criticaron la lentitud de la justicia y también que actuara de forma selectiva, al evitar citar a quienes consideraban los responsables últimos de la tragedia.

En la lista de acusados por la Fiscalía no estaban ni el presidente de la empresa organizadora del festiva (Lopavent), Rainer Schaller, ni el entonces alcalde de la ciudad, Adolf Sauerland, que dimitió en 2012 después de que una abrumadora mayoría de sus conciudadanos votara en un referéndum a favor de su cese, por considerarlo en parte responsable de lo ocurrido.

El Loveparade comenzó a celebrarse en Berlín en 1989 como un festival tecno callejero y en pocos años se convirtió en un evento de masas con cientos de miles de asistentes y decenas de actuaciones y DJ invitados.

En 2004 y 2005 el festival se suspendió al no contar con los suficientes patrocinadores y en ese momento entró en el negocio la empresa Lopavent.

En 2006 se celebró el último Loveparade en Berlín y los años siguientes el festival peregrinó por otras ciudades alemanas, hasta la última edición de 2010, en Duisburgo.

Efe