Libia

Libia aprueba la ley que impide a los cargos superiores de Gadafi trabajar para la actual administración

El Parlamento de Libia ha aprobado este domingo una ley que prohíbe a cualquier persona que tuviera un cargo superior durante el régimen del exlíder libio Muamar Gadafi trabajar para la nueva administración, una ley que podría forzar la dimisión del primer ministro, Alí Zeidan.

El Parlamento de Libia ha aprobado este domingo una ley que prohíbe a cualquier persona que tuviera un cargo superior durante el régimen del exlíder libio Muamar Gadafi trabajar para la nueva administración, una ley que podría forzar la dimisión del primer ministro, Alí Zeidan.

Zeidan fue diplomático del régimen gadafista antes de desertar en 1980 y de unirse a la oposición. El texto de la recién aprobada ley no aclara si el cargo que ocupó es lo suficientemente elevado como para impedirle formar parte del nuevo Gobierno.

Una fuente de la oficina del primer ministro ha reconocido no saber si la ley adoptada obligará a dimitir a Zeidan ya que "el texto es bastante confuso", y ha añadido que todo dependerá de cómo se implemente la nueva ley.

El texto ha sido discutido durante meses y la votación de este domingo ha sido provocada por las acciones de grupos de hombres fuertemente armados que se hicieron con el control de dos ministerios gubernamentales y que afirmaron que no se marcharían a menos que la ley fuera aprobada.

"Es una ley muy injusta y extrema pero necesitamos poner los intereses nacionales primero para resolver la crisis", ha declarado el portavoz del partido liberal Alianza de Fuerzas Nacionales, Tawfiq Breik.

Este domingo, más de una decena de vehículos equipados con armas antiaéreas y ametralladoras permanecían aparcados ante las sedes del Ministerio de Justicia y del Ministerio de Asuntos Exteriores. Uno de los hombres allí presentes ha asegurado que no abandonará el lugar a menos que el primer ministro sea obligado a abandonar el cargo. "Durante un año les hemos estado pidiendo que se encarguen de los amigos de Gadafi", ha señalado.

Los diplomáticos presentes en la capital libia, Trípoli, han denunciado que someter el texto a votación bajo coacción debilita su legitimidad y ayer la ONG Human Rights Watch (HRW) instó al Parlamento a rechazar el último borrador de la ley.

"Esta ley es demasiado vaga ya que podría impedir que cualquier persona que haya trabajado alguna vez para las autoridades durante las cuatro décadas del régimen de Gadafi", afirmó la directora para Oriente Próximo y Norte de Africa de HRW, Leah Whitson.

Aunque aún no está claro si la nueva ley será aplicable a Zeidan, el presidente del Congreso Nacional libio y antiguo embajador, Mohammed Magarief, estará obligado a dimitir a pesar de haber vivido en el exilio desde 1980, cuando se convirtió en una de las principales figuras de la oposición libia.

Los miembros del Congreso han revelado que esta nueva ley podría aplicarse a otros 40 miembros del Parlamento, que se compone de 200 parlamentarios.