Crisis en Sudán del Sur

Los rebeldes sursudaneses admiten la perdida del estado petrolero de Unidad

Los rebeldes sursudaneses admitieron hoy que han perdido el control de la ciudad de Bentiu, capital del estado de Unidad, en el norte del país.

Los rebeldes sursudaneses admitieron hoy que han perdido el control de la ciudad de Bentiu, capital del estado de Unidad, en el norte del país.

"Ayer perdimos el control de Bentiu, pero fue una retirada táctica para evitar bajas de civiles", dijo a los periodistas en Adis Abeba el portavoz de los sublevados Lul Ruai Koang.

Ruai, que forma parte de la delegación rebelde que mantiene conversaciones de paz con el Gobierno en la capital etíope, aseguró que su grupo todavía controla nueve provincias del estado de Unidad.

Mientras tanto, Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció hoy el saqueo de sus instalaciones en la ciudad de Bentiu.

"Es inaceptable que una de las pocas organizaciones humanitarias que aún dan asistencia a la población en Bentiu haya sido saqueada", dijo en un comunicado el director general de MSF, Arjan Hehenkamp.

Según la nota, el pillaje que ha sufrido la organización pone en peligro su respuesta a la situación de violencia y amenaza sus operaciones en Sudán del Sur.

El personal de MSF en Bentiu fue trasladado el miércoles a la ciudad de Leer, a tres horas y media en automóvil, debido al deterioro de la situación en la ciudad recuperada ayer por el Gobierno.

Los médicos de MSF han comenzado a recibir heridos en Leer procedentes del frente de Bentiu, según el comunicado de la organización.

Las negociaciones entre las delegaciones de Gobierno y rebeldes comenzaron el pasado lunes en Adis Abeba y están impulsadas por la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD).

Sin embargo, las conversaciones de paz de la capital etíope entre las dos partes encallaron por la negativa del Gobierno sursudanés a liberar a los sediciosos encarcelados.

La violencia en Sudán del Sur estalló el pasado 15 de diciembre por un intento de golpe de Estado perpetrado por el exvicepresidente y hoy jefe rebelde Kier Mashar, según sostiene el Salva Kir, y desde ese día han fallecido miles de personas en el país.

Para tratar de evitar que la crisis derive en una guerra civil, varios países africanos realizan esfuerzos mediadores, y tanto EEUU como la Unión Europea (UE) han enviado a sus representantes especiales a la región.

El joven país afronta el mayor desafío desde su nacimiento en julio de 2011, tras independizarse de Sudán.