Política

Estados Unidos

Los republicanos llevan al Senado la propuesta de Trump para reabrir el Gobierno

El Senado votará el jueves el plan del presidente para lograr financiación para el muro en la frontera con Mexico y acabar con el cierre gubernamental que comenzó el 22 de diciembre.

Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana en el Senado de los Estados Unidos
Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana en el Senado de los Estados Unidoslarazon

El Senado votará el jueves el plan del presidente para lograr financiación para el muro en la frontera con Mexico y acabar con el cierre gubernamental que comenzó el 22 de diciembre.

El Senado de EE.UU. comenzó hoy a debatir la propuesta del presidente Donald Trump para acabar con el cierre parcial administrativo, que llegó a su día 32, con la mayoría republicana buscando su aprobación mientras los demócratas critican la falta de compromiso frente a la cuestión migratoria. La prolongada paralización gubernamental, que afecta a un 25 % de la Administración, ha despertado además la solidaridad de distintas personalidades hacia los 800.000 empleados federales que no han recibido su pago quincenal por segunda vez desde el pasado 22 de diciembre, cuando empezó el cierre.

El líder de la mayoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell, presentó la iniciativa anunciada el pasado sábado por Trump, en un intento por desatascar la aprobación de fondos para algunas agencias federales que no cuentan con presupuesto y asegurar la financiación para el muro en la frontera con México. Trump ofreció extender dos programas migratorios cancelados por él mismo, la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y el Estatus de Protección Temporal (TPS) para refugiados extranjeros, a cambio de los 5.700 millones de dólares para construir el muro. Casi al cierre de la jornada se conoció que los líderes del Senado llegaron a un acuerdo para que el próximo jueves se voten sendas propuestas para acabar con el cierre parcial.

McConnel fijó dos votaciones para la tarde del jueves, cada una de las cuales requerirá el respaldo de 60 senadores para avanzar. La primera votación, según la publicación The Hill, sería sobre la propuesta de Trump, y en caso de que fracase se consideraría una “resolución continua” -que es un tipo de legislación de asignaciones presupuestarias que permite reservar fondos para departamentos, agencias y programas federales específicos- de tres semanas. “Por primera vez, obtendremos una votación sobre si abrir el Gobierno sin ninguna decisión de una manera u otra sobre seguridad fronteriza”, dijo el líder de la minoría demócrata, Chuck Shummer, sobre el acuerdo, según declaraciones difundidas por The Hill.

Aunque nada garantiza que en ambas votaciones se alcance el apoyo requerido, el acuerdo ha sido interpretado por algunos sectores como un avance después de semanas de desencuentros entre ambos partidos. Al intervenir en la sesión de hoy, McConnel subrayó que “lo que tiene que suceder es que los demócratas estén de acuerdo en que es hora de poner al país por delante de la política”. “La oportunidad de terminar con todo esto nos está mirando a la cara”, declaró McConnel, que calificó como “integral”, “bipartidista” y “sólida” la propuesta presentada por el gobernante estadounidense y subrayó que es lo “único que está sobre la mesa”.

En su turno, Shummer alertó de que la oferta de algunas protecciones temporales a cambio del muro fronterizo “no es un compromiso” y la consideró “una toma de rehenes”. “Cuando el presidente dice que dará DACA y TPS parcialmente, a pesar de que él creó el problema por su cuenta a cambio del muro, es como una negociación por bienes robados”, sentenció Schummer, quien junto a la líder demócrata de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, ha liderado la oposición a la barrera fronteriza. Pero a medida que el cierre se extiende, la preocupación por los empleados federales que deben cumplir con sus funciones sin devengar un salario ha tocado a distintas personalidades que han empezado a dar muestras de solidaridad. En Nueva York, los Nets y el Banco de Alimentos de la ciudad distribuyeron comida a unas 500 familias en el estadio de ese equipo de baloncesto, el Barclays Center. Efe.