Unión Europea

Macron: Más Europa para frenar el nacionalismo

Con un solemne discurso en la Sorbona, el presidente francés exhibe su visión para refundar la UE ante una Alemania enfrascada en sus resultados electorales. Propone sumar a España, Italia y Portugal al eje franco-alemana, una mayor integración en Defensa e impulsar una gobernanza de la zona euro

El presidente francés, Emmanuel Macron, durante su discurso
El presidente francés, Emmanuel Macron, durante su discursolarazon

Con un solemne discurso en la Sorbona, el presidente francés exhibe su visión para refundar la UE ante una Alemania enfrascada en sus resultados electorales. Propone sumar a España, Italia y Portugal al eje franco-alemana, una mayor integración en Defensa e impulsar una gobernanza de la zona euro.

Emmanuel Macron propuso refundar la Europa de hoy, «demasiado débil, lenta e ineficaz », para transformarla en una Europa «soberana, unida y democrática». En la Universidad de la Sorbona, rodeado de unas 800 personas, en su mayoría estudiantes, Macron fue esbozando las medidas que deberían configurar la Europa con la que él sueña y llamó a impedir «el repliegue nacional, que sería un fracaso colectivo». «Los nacionalismos, los identitarismos y los proteccionismos han prendido la llama donde Europa podría haber perecido, helos aquí bajo nuevos ropajes», dijo Macron.

El presidente francés no eligió al azar la fecha para dar a conocer sus planes sobre Europa. Los recientes resultados de las elecciones en Alemania obligan a su canciller a negociar con nuevos socios la formación del Gobierno, y Francia quiere pesar en esas conversaciones. Igual que Angela Merkel propuso hace unos meses, Macron apuesta por una Europa a varias velocidades. «Europa funciona ya a varias velocidades, no tengamos miedo de decirlo y de quererlo», comentó el presidente galo, que apostó por «acelerar el ritmo» sin dejar a ningún país excluido, pero sin que «ninguno ponga trabas a los que quieren ir más lejos».

Popuso la creación de un «grupo de refundación europea» que trabaje sobre una mayor integración de países voluntarios, entre los que, además de Alemania, ha citado a España, Bélgica, Países Bajos y Portugal. «Europa avanzará por la determinación de unos pocos, sin que ello sea razón de exclusión», insistió Macron al mismo tiempo que planteó «una zona euro fuerte, eficaz y solidaria con un ministro común que será controlado por el Europarlamento». Rechazó las críticas de Alemania asegurando que lo que está en juego «no es mutualizar nuestras deudas pasadas ni solucionar los problemas de presupuesto de un país u otro, sino la reducción del paro», y confió en que a partir de noviembre se discuta sobre la determinación de un salario mínimo europeo.

Francia quiere ir aún más lejos con Alemania, y para encarnar «un espíritu pionero» Macron propone «una nueva asociación» en la que estén integrados «totalmente» los mercados de los dos países, para que antes de 2024 se apliquen las mismas normas a todas las empresas. Y en esa línea quiere «revisar el Tratado del Elíseo» que firmaron en 1963 Charles de Gaulle y Konrad Adenauer para sellar la reconciliación de Francia y Alemania.

En materia de defensa, Macron propuso reforzarla con la creación de una «fuerza común de intervención» europea, un presupuesto y una «doctrina común» de acción. Entre las medidas concretas que esbozó figuran la acogida en los ejércitos nacionales de militares del resto de países europeos o la creación de «una fuerza europea de seguridad civil» para actuar en caso de catástrofes naturales. Para la lucha antiterrorista, el presidente francés aboga por la creación de una academia europea de servicios de información y la creación de una fiscalía antiterrorista europea.

Ante el desafío de la inmigración, Macron quiere crear una oficina europea de asilo para armonizar y acelerar los procedimientos y acoger dignamente a los refugiados, así como una policía europea de fronteras para garantizar la gestión de las mismas y asegurarse de la expulsión de los que no son admitidos en la UE.

Una de las grandes preocupaciones para Macron es el refuerzo de los nacionalismos y la extrema derecha, y por ello quiere que el año que viene, durante seis meses, tengan lugar «convenciones democráticas», debates nacionales y locales sobre los temas comunes a toda la Unión Europea, en aquellos países que lo deseen, para definir la hoja de ruta del futuro común.

Aprovechando la marcha de los 73 eurodiputados británicos, el presidente galo propone que el Parlamento Europeo se refuerce desde 2019 sustituyéndolos por europarlamentarios de listas transnacionales, y que a partir de 2024, éstos constituyan la mitad de la Eurocámara. «Creo profundamente que Europa debe estar en la vanguardia de la transformación ecológica eficaz y justa», dijo el presidente, que apuesta por un mercado europeo de la energía. «Necesitamos desarrollar las interconexiones con España y Portugal», añadió Macron y la creación «indispensable» de una tasa «justa» por las emisiones de dióxido de carbono en las fronteras de Europa, que sea de, al menos, entre 25 a 30 euros por tonelada.

En materia de política agraria, Macron pidió medidas más flexibles y menos burocráticas para favorecer una «gran transición agrícola» que permita asegurar la soberanía alimentaria de Europa y proteger mejor a sus agricultores «frente a la volatilidad de los mercados mundiales». En materia de cultura y educación, propuso fomentar la creación de universidades europeas que faciliten el estudio en el extranjero, y que cada joven europeo hable obligatoriamente dos idiomas y pase al menos seis meses en otro país.