Brexit

La posible victoria laborista en 2024 reabre el debate del Brexit

Un informe franco-alemán sugiere que Reino Unido 
se convierta en 
un Estado asociado de la UE en 2030

Desde el mismo minuto en el que se anunció el triunfo del Brexit en junio de 2016, se comenzaron a valorar las opciones que tenía Reino Unido para regresar a la Unión Europea. Se tardó tiempo para asimilar el histórico divorcio y aún más para negociar una ruptura que no fuera abrupta, a fin de evitar el colapso económico. Pero parece que los británicos no son capaces de pasar página. ¿Puede convertirse Reino Unido en el nuevo «miembro asociado» del bloque para 2030?

En plena precampaña para los comicios del próximo año y con todos los sondeos vaticinando un nuevo Gobierno laborista capitaneado por Keir Starmer (que en su día votó por la permanencia en la UE), el Brexit vuelve a protagonizar las portadas ante la promesa del ahora líder de la oposición de «mejorar» el Acuerdo de Comercio y Cooperación negociado en su día por Boris Johnson.

El pacto fue sellado entre Londres y Bruselas el 24 de diciembre de 2020. Pero no supuso el capítulo final del tortuoso divorcio. Nada más lejos de la realidad. El artículo 776 establece una revisión cada cinco años, por lo que brinda una oportunidad a ambas partes para volver a sentarse en la mesa. Y el calendario coincide con un momento clave, ya que el eje franco-alemán ha presentado una propuesta de ampliación de la UE con cuatro niveles de integración.

No es que en Bruselas exista una obsesión por querer recuperar a toda costa a Reino Unido, la sexta economía del mundo. Las prioridades ahora para el club comunitario son otras, sobre todo cuando se enfrenta a uno de sus desafíos más graves de los últimos años con la llegada masiva de inmigrantes a la isla italiana de Lampedusa que ha expuesto las profundas divisiones entre los Estados miembros.

Pero la invasión de Ucrania ha marcado un antes y un después. La ampliación del bloque realmente tiene en mente a Ucrania y los Balcanes occidentales para evitar que, de una forma u otra, terminen bajo el control ruso.

En cualquier caso, fuentes diplomáticas europeas aseguraban a The Times que la idea de una UE a cuatro velocidades también ha sido diseñada pensando en Starmer en Downing Street. La propuesta está cuidadosamente equilibrada políticamente para ser una posibilidad potencial para Londres sin la necesidad de volver a unirse o un referéndum.

La posible ampliación se recoge en el informe elaborado por un grupo de doce expertos convocados por los Gobiernos de Francia y Alemania para valorar además aumentar la capacidad de acción de la UE y fortalecer el Estado de derecho y la legitimidad democrática. El texto ha tenido más repercusión en los medios británicos que en el resto de europeos, sobre todo después de que Starmer ha dicho que no quiere que Reino Unido se aparte de la normativa de la UE. «Obviamente, cuanto más valores compartamos, más futuro juntos tendremos. Habrá menos conflictos y, de hecho, tendremos más formas diferentes para resolver los problemas», señaló en su gira internacional.

Ante las críticas de los euroescépticos, que le acusan de querer «traicionar el Brexit», Starmer insiste en que no hay motivos para volver a unirse a la UE. Miembros destacados de su equipo, como Jonathan Reynolds, han descartado la posibilidad de «miembro asociado». Pero una cosa es lo que dicen en público y otra distinta lo que comentan en privado. Una clara mayoría de los afiliados laboristas están a favor exactamente del tipo de «membresía asociada» que ofrece el plan franco-alemán. Saben que no pueden decirlo abiertamente porque no hay ningún deseo de volver a abrir la caja de pandora del Brexit y correr el riesgo de que se repita su derrota electoral de 2019. Pero en privado creen que el statu quo es insostenible a largo plazo y que, como mínimo, Reino Unido necesita una relación más estrecha, al estilo de Noruega, con el que es su mayor socio comercial.

Reino Unido ya pertenece a la actual Comunidad Política Europea, el foro de conversación de más de 40 naciones creado por Francia. Es más, en la próxima cumbre de la primavera de 2024 Londres será el anfitrión.