Un lavado de imagen

l ¿Qué valoración hace del encuentro de la oposición moderada siria en Córdoba?

–Muy positiva, sobre todo por la decisión de crear un congreso nacional que reúna definitivamente a todas las fuerzas de la revolución y a la oposición política exterior ante la moribunda situación de nuestro país. También estamos muy contentos con que esta cita se haya celebrado en España, un país que está ayudando a nuestra causa. Siria necesita el apoyo de países como éste, experto en democracia y que ha sufrido una etapa de transición que nos puede servir de ayuda.

l ¿Por qué la CNS está dilatando tanto su decisión sobre la participación en Ginebra II?

–Las conversaciones de Suiza deben acordar previamente las condiciones en las que se celebrarán y ser claramente verificadas, algo que hasta ahora no se ha producido. Por ejemplo, el régimen de Asad se ha mostrado contrario a dejar el poder y ésta es una cuestión básica para nosotros. Estas cuestiones deben ser tratadas y definidas por los países de la comunidad internacional que están organizando el encuentro.

l ¿Qué novedad aporta la Conferencia de Salvación Nacional anunciada ayer?

–Las fuerzas de oposición no han sido capaces hasta ahora de aunar fuerzas. Por este motivo es necesario reforzarse y es lo que se hará en este congreso, que se celebrará en un mes aproximadamente. Allí reuniremos a todas las voces opositoras y acabaremos con las críticas que recibimos de algunas facciones y la exclusión que dicen que sufren.

l ¿Qué necesita la comunidad internacional para confiar plenamente en la oposición?

–Tiene que constatar que la oposición está unida y libre de cualquier fanatismo y extremismo religioso. Comprobar que no existe otra versión fuera de los condicionantes que se han puesto en Córdoba. Una oposición moderada que no toma un lema religioso como bandera. La libertad y la democracia es lo que queremos. Un país plural y diverso.

l ¿Aceptará el CNS la asistencia de Irán a Suiza?

–El rechazo a Irán está promovido por Occidente. Ni EE UU ni Europa ven con buenos ojos la participación de Irán, quien sólo quiere participar por la alianza estratégica y económica que tiene en la zona. Nosotros creemos que esos intereses están por debajo de la revolución siria y por ello no vemos lógico que participe un país que tiene manchadas las manos de sangre de sirios. No pueden ser parte de la solución porque precisamente son parte del problema. Teherán primero tiene expulsar a todos sus hombres fuera del territorio sirio y luego empezar a pensar que puede formar parte de la solución política al conflicto sirio.

*Miembro del Consejo Nacional Sirio. Preguntas elaboradas por Á. Nieto