Un terrorista vinculado a Al Qaeda huye de una mezquita con un «burka»

A sus 27 años, Mohamed Ahmed Mohamed es uno de los sospechosos de terrorismo más peligrosos de Reino Unido, y, desde ayer, también, el responsable de ridiculizar tanto a Scotland Yard como al Gobierno. De origen somalí, el joven estaba sometido a estrictas medidas de vigilancia. Pero el viernes consiguió burlar el control policial al salir de una mezquita vestido con un «burka» de mujer. La ministra del Interior, Theresa May, tuvo que dar la cara ante la Cámara de los Comunes y explicar cómo el sospechoso –con fuertes vínculos con Al Qaeda y entrenado por Al Shabaab– pudo escapar utilizando un plan tan poco elaborado. May recalcó que aunque no supone una «amenaza directa» para Reino Unido, es urgente que todo aquel que le haya visto se ponga en contacto con las autoridades.

Mohamed es el segundo sospechoso sometido a la llamada TPIM en desaparecer en menos de un año. Las pasadas Navidades, Ibrahim Magag, también consiguió burlar la vigilancia al meterse en un taxi. No ha sido visto desde entonces. El programa de prevención contra el terrorismo y medidas de investigación –conocido como TPIM y aplicado a aquellas personas que no pueden ser detenidas o deportadas– fue introducido por el Gobierno de coalición el año pasado para sustituir a la estricta regulación de 2005, que incluso permitía trasladar al sospechoso a otra ciudad para que no tuviera contacto con su entorno. La nueva normativa, sin embargo, incluye pulseras electrónicas, visitas periódicas a la comisaría para informar de sus actividades y la prohibición, entre otras, de salir del país. El sospechoso puede utilizar, con condiciones, el teléfono móvil e internet para trabajar o estudiar. «La Policía y los servicios de seguridad han confirmado que no creen que sea una amenaza directa para los ciudadanos. La razón por la que fue puesto bajo TPIM era para evitar que viajar al extranjero para apoyar a células islámicas extremistas», recalcó May.

Por su parte, la oposición laborista acusó al Gobierno de «irresponsable». «Se advirtió sobre los peligros de relajar los controles. Ya han escapado dos individuos», recalcó la diputada Yvette Cooper.

Mohamed fue visto por última vez en el centro islámico de An-Noor Masjid, en el barrio de Acton, al oeste de Londres. La Policía divulgó ayer fotos tomadas de las cámaras de seguridad en las que se le ve entrando al templo vestido con ropa casual y saliendo con el cuerpo y el rostro cubiertos con un «burka» haciéndose pasar por una mujer.