Las jóvenes españolas sí quieren ser Doña Letizia

Una encuesta revela que a las españolas de entre 18 y 29 años sí les gustaría ser como Doña Letizia.

El sondeo de «Newsweek» sobre la duquesa de Cambridge abría el debate: «¿Por qué las mujeres no quieren ser Kate Middleton?». A pesar de que de que la esposa de Guillermo de Inglaterra tiene una gran capacidad de influencia, especialmente entre las mujeres, que la han coronado como la suprema «it girl» (ha llegado a producir un aumento de las ventas del 500% en marcas que ha lucido y se calcula que genera 700 millones de euros en la industria textil británica), sólo una de cada cien inglesas desearía ser como ella y únicamente un 11% experimentaría estar en su piel por un día. Datos especialmente relevantes si se tiene en cuenta que un 32% de las encuestadas estarían dispuestas a compartir una amistad con quien está llamada a ascender al trono británico. La corona parece haber pasado de ser una preciada joya a convertirse en una suerte de cepo para la libertad y si antes se contemplaban las fronteras de palacio como una quimera, ahora son pocos los que estarían dispuestos a asumir la responsabilidad que se condensa entre sus muros. El reportaje de «Newsweek» confirma que muy pocos asumirían los compromisos y obligaciones que corresponden a una monarca, una tendencia que corrobora la encuesta de NC Report realizada para LA RAZÓN y con la Reina Letizia como protagonista. Con una sustancial diferencia: los jóvenes españoles de entre 18 y 29 años sí se sienten muy identificados con la afirmación «Me gustaría ser como ella» (en una escala del 1 al 10, siendo 1 nada de acuerdo y 10 totalmente, le otorgan un 8,7). Sin embargo, el cómputo global promedia un 5,6, un tibio resultado si se tiene en cuenta que el grado de representación crece un punto cuando se refiere a la afirmación «no me gustaría ser la Reina, pero sí conocerla o ser su amiga» (nuevamente el grupo de entre 18 y 29 años eleva la cifra hasta el 8,7). Si bien la esposa de Felipe VI no tendría problemas en cultivar amistades, se encontraría con más dificultades a la hora de encontrar una sustituta que asuma sus privilegios y responsabilidades ni siquiera durante un día por lo que parece que en la balanza del común de los mortales pesan más los deberes del papel de la consorte que las facilidades y ventajas que van asociados a él. Sin embargo, la valoración de la Reina sigue siendo bastante positiva: un 50,4% juzgan muy importante o sustancialmente importante su papel dentro de la Familia Real española y el 64,2% de los encuestados consideran que representa la evolución de la mujer y simboliza el ideal de la fémina moderna, una cifra que crece especialmente entre los miembros de su generación (en el grupo de 30 a 44 años, el dato asciende a un 65,5% y en el de 45 a 64, se queda a dos puntos del 70%). No en vano, muy por encima de su belleza o de su atractivo, la inteligencia es la cualidad que más destacan en la esposa de Felipe VI: un 72,2% la eligen como la palabra que mejor asocian a la Reina seguida del adjetivo trabajadora (54%). Datos a valorar si se tiene en cuenta que en la encuesta de «Newsweek» sobre Kate Middleton su belleza (64%) y su amabilidad (51%) eran los aspectos mejor considerados por los británicos en la esposa del príncipe Guillermo. En cuanto a la consorte española, la valoración del poder, su atractivo y su cercanía obtienen, respectivamente, un 31,5%, un 30,5% y un 21,2%, algo que podría explicar por qué se considera un buen referente para la sociedad. De hecho, para un 32,8% de los encuestados es un gran ejemplo para las jóvenes de hoy en día, sólo superada por su suegra, la Reina Sofía (que obtiene un 33,5%) y por delante de estrellas del «star system» como Angelina Jolie (30,2%) o de artistas nacionales como Malú. La «first lady» americana se considera un modelo a seguir por un 15,3% de los españoles, la misma cifra que obtiene Ana Botín y medio punto más de lo que consigue Carla Bruni. Entre las representantes políticas, Esperanza Aguirre suma un 7,2% y Tania Sánchez, diputada de la Asamblea de Madrid y habitual tertuliana de la televisión –al igual que su pareja, el líder de Podemos, Pablo Iglesias– llega a un discreto 1,2%. En cuanto a la capacidad de influencia que la Reina ejerce sobre aspectos concretos, los españoles no consideran en absoluto a la consorte un cero a la izquierda. La educación de sus hijas, las pequeñas Leonor y Sofía es una de las áreas en las que los encuestados le otorgan una mayor autoridad (del 1 al 10, valoran su poder en este asunto con un 7,9), seguida de su relación con Don Felipe (7,6) y su propia vida (6,6), sus discursos y declaraciones públicas (6,2) y la Monarquía (5,7), la institución en la que comenzó a ejercer como Reina el pasado mes de junio. Quizá por su creciente y notable importancia dentro de la Casa Real, los encuestados valorarían positivamente que la consorte se implicara más en causas benéficas (para el 48,7% sería el cambio que más apreciarían), aunque gran parte de su agenda la protagonizan precisamente estos asuntos –de hecho, ya es presidenta de Honor la Asociación contra el Alzhéimer y está muy vinculada a la lucha e investigación de las enfermedades raras–.