Nueva York

Bienvenido, Mr. Vázquez

Hace diez años dejó la pasarela Cibeles para trabajar con Loewe y consolidar los pilares de su firma.. Este 22 de febrero vuelve a Mercedes Benz Fashion Week Madrid con más ganas que nunca.

A la izda, Marta Hazas con un mono de cuadro vichy. A su lado, Jorge Vázquez y Huga Rey con abrigo de lentejuelas de la colección de verano. Delante, Clara Courel con un vestido bordado a mano, que el diseñador realizó para la hija de Sofia Tassara Hoffmeyer
A la izda, Marta Hazas con un mono de cuadro vichy. A su lado, Jorge Vázquez y Huga Rey con abrigo de lentejuelas de la colección de verano. Delante, Clara Courel con un vestido bordado a mano, que el diseñador realizó para la hija de Sofia Tassara Hoffmeyerlarazon

Hace diez años dejó la pasarela Cibeles para trabajar con Loewe y consolidar los pilares de su firma. Este 22 de febrero vuelve a Mercedes Benz Fashion Week Madrid con más ganas que nunca.

«Ahora que no lo solicitaba, me han llamado». Dice Jorge al comenzar una conversación larga y sincera en su atelier de Madrid, General Castaños, 11, donde ha reunido a tres mujeres que le aportamos, como él dice, distintas visiones de una misma manera de entender su moda. Él a nosotras nos encanta porque «es chic y en sus creaciones nunca se olvida de la comodidad», comenta Marta Hazas, una de las actrices más bellas del panorama nacional. La otra espléndida joven que nos acompaña es Huga Rey, confidente y musa de Jorge. «Le conocí trabajando y de ahí surgió una amistad que mucho tiempo después sigue siendo sólida. Hemos pasado juntos por momentos buenos y no tan buenos. Es, sin duda, uno de mis mejores amigos», apunta Huga. La tercera es, ya lo ven, una servidora, alguien que admira a este diseñador por su discreción, su tesón y su coherencia estética y que ha colaborado con la firma en mil y una ocasiones.

Sin pensarlo dos veces

«Me hizo mucha ilusión porque hasta ahora no había sitio para mí en la MBFW y la llamada ha surgido en un momento muy importante de mi carrera», apunta. «Estoy tremendamente emocionado. Sin pensarlo dos veces, dije que sí», asegura el diseñador, que mañana ofrecerá un desfile exótico, en el que confluirán muchas de sus señas de identidad, con el orientalismo de principios del siglo XX y Paul Poiret como hilos conductores. Veremos estampados de grullas, flores, rayas y pata de gallo; exaltación colorista gracias al rojo flúor, el esmeralda, el azul marino y el cámel, mezclados con tonos más tenues como el rosa cuarzo y el porcelana y, al tratarse de una colección de invierno, la profusión de tejidos de calidad y calidez como la lana «cashmere», el tul, las muselinas bordadas de lentejuelas, el satén y el encaje estará servida.

Pablo, uno de los miembros de su equipo, irrumpe en la sala de grandes ventanales y techos altos ribeteados por molduras clásicas donde nos encontramos. Aquí recibe a las novias y clientas a las que atiende personalmente. El diseñador le pide a su colaborador que busque un aroma tropical. ¿Entiendo que en el desfile olerá bien?, le pregunto, y aunque prefiere no desvelar demasiado, dice: «Sí, disfrutaréis de un ambiente especial que lo invadirá todo». ¿Y la puesta en escena? «Si hubiera hecho este desfile fuera de Ifema habría sido en una carpa de circo con malabaristas y payasos que recibirían a los invitados con manzanas de caramelo y algodones de azúcar», comenta. «Espero no defraudar y sorprenderos con algo casi mágico, con una propuesta sexy, femenina y lencera, como sacada de “Las mil y una noches”», concluye.

Jorge apunta que «habrá marineras, vestidos de chantilly con transparencias y bordados, otros tipo enaguas y, además, rescato la idea del pijama. También veréis uno de nuestros “hits”, el pantalón de campana y, cómo no, el vestido de cóctel». En cuanto a los complementos de creación propia, mostrará botas de caña alta, zapatos D’Orsay de tacón y carteras de boquilla en pitón, «glitter» y leopardo con toques florales.

Le pregunto qué ha pasado en estos diez años en la vida de Jorge Vázquez, uno de los pocos diseñadores españoles que podrían presumir (él no lo hace) de vender mucho, no sólo en su tienda de la calle Orellana, 12, de Madrid, sino en otros muchos puntos de España. «En este tiempo he tratado de asentar mi empresa, de madurar como diseñador y no he parado de hacer colaboraciones con grupos diferentes. Hago costura y medida para novias y continúo con la línea “prêt-à-porter”. Quiero abrir tiendas en Coruña, mi tierra, y en Santander. Mi sueño es poder volar al extranjero», comenta. Entre todo eso, tiene tiempo para ser director creativo de cuatro firmas de El Corte Inglés, además de realizar una colección cápsula llamada Síntesis by Jorge Vázquez y otra para mujeres «curvie», Couchel, ambas para los grandes almacenes. Hablando de la internacionalización de la marca, Jorge nos cuenta, en rigurosa primicia, que su colección de verano, a punto de aterrizar, estará a partir de marzo presente en uno de los espacios más exclusivos de París, las tiendas multimarca Leclaireur, donde su etiqueta convivirá con las de Givenchy, Saint Laurent y Fendi.

«Claro que tengo muchas aspiraciones. Una de ellas es trabajar como director creativo para una marca internacional y, si hay una que me quita el sueño, es Oscar de la Renta. Adoro la aportación de este señor al mundo de la moda. Era un hombre fascinante». Y desfilar con su propia firma fuera, ¿se lo plantea? «Me encantaría desfilar en Nueva York, porque creo que es una pasarela comercial y, al fin y al cabo, Estados Unidos es el escaparate para el mundo. Es uno de los proyectos que tengo en mente e imagino que con trabajo y esfuerzo podría surgir».