Moda

España, España, España

El nuevo número de «Harper's Bazaar» está dedicado completamente a nuestro país: sus tradiciones, su moda y su gente.

Las portada de la edición de abril de «Harper's Bazaar», protagonizadas por Ophelie Guillermand
Las portada de la edición de abril de «Harper's Bazaar», protagonizadas por Ophelie Guillermandlarazon

El nuevo número de «Harper's Bazaar» está dedicado completamente a nuestro país: sus tradiciones, su moda y su gente.

La portada del número que hoy pone a la venta la revista femenina más veterana del mundo, «Harper's Bazaar», que nació en Estados Unidos en 1867, promete llamar mucho la atención. Sin caer en los tópicos, ha conseguido hacer un homenaje a todo lo que nos une y que es curiosamente de lo que llevan años apropiándose las firmas extranjeras. Nuestro rico folclore, la cultura diversa y única, los colores, la alegría, las ganas de vivir, los lunares y los volantes, el ganchillo y los bordados, la piel y sus curtidores, la cestería y la gastronomía llevan años siendo patrimonio de la humanidad, los mismos años que llevamos sin sacar pecho por todo ello. Si algo tiene de bueno la situación en la que nos ha puesto Cataluña y su «procés» es que nos ha hecho sentir la necesidad de reivindicarnos. Y que lo haga una cabecera de referencia mundial es toda una declaración de principios.

Cuando Yolanda Sacristán, directora de la edición española, acudió en septiembre del año pasado a ver las colecciones de moda en las pasarelas de Milán y París, descubrió que casi todos los diseñadores que allí presentaban sus creaciones usaban elementos de la artesanía española: encajes, volantes, lunares y hasta ganchillo. Además, notó que se inspiraban en los colores de nuestra insignia en muchos de sus diseños. En algunos, incluso, como en el caso de Etro, estaban presentes tal cual, en formato bandera.

Rojo y amarillo

«Ahí empecé a ver que España era tendencia», nos comenta Yolanda Sacristán. «Se nos ocurrió que el rojo y amarillo serían el hilo conductor de todo el número que sale a la venta hoy. Si nuestra artesanía y los colores de nuestra bandera estaban presentes en todas las colecciones de las pasarelas internacionales, por qué nosotros no lo llevábamos a nuestras páginas, si son nuestras raíces», asegura. «Me siento muy española y pensé que sería un bonito homenaje hacia nuestro país porque son los dos colores que nos unen. En la bandera catalana también están presentes y de ahí que el número lo empezásemos en Barcelona, nos parecía que había que dar un paso e implicarse», añade Sacristán. Y se han implicado tanto que no se olvidan de la inspiración adlib ibicenca, la lagarterana de Castilla o la jotera del País Vasco o Navarra. «Hacemos un homenaje fuera de lo obvio –asegura– y lo llevamos a todas las secciones. En belleza, por ejemplo, sacamos a una Lulú Figueroa de gitana rubia, el perfume rojo de Narciso Rodríguez y el surrealismo de Dalí». En las dos versiones de la portada, la modelo francesa Ophelie Guillermand hace justicia a la peineta y la bandera.

Por otra parte, el clavel rojo ha sido el hilo conductor de las entrevistas, de ahí que Penélope Cruz, que declara haber sido víctima de abuso de poder varias veces, el presidente de Tabarnia, Albert Boadella, y el diseñador catalán Josep Font, que reconoce inspirarse en España y utilizar la artesanía nacional en sus trajes, posen todos con un clavel rojo. Además, gracias a que «Harper's Bazaar» es una cabecera internacional, las 196 páginas de la edición española se verán en todos los países del mundo. Nunca tres euros con cincuenta céntimos han hecho tanto por la marca España.