A Sevilla se le enquista la zona azul

La ampliación de la zona azul a nuevas calles de los barrios de Nervión, Bami, Macarena y la Cartuja se le está complicando al Ayuntamiento hispalense. La junta municipal del distrito Macarena acaba de aprobar una propuesta del PSOE en la que se insta a la «inmediata paralización» de la licitación del contrato de gestión de este servicio, argumentando que la iniciativa se estaba llevando a cabo «de espaldas a los vecinos».

Sin embargo, los residentes han solicitado en reiteradas ocasiones la implantación de la zona azul no sólo al actual equipo de Zoido, sino al anterior, cuando gobernaban en coalición PSOE e IU. Así lo expresa el presidente de la asociación de vecinos «concejal Alberto Jiménez-Becerril», Víctor Manuel Díaz, en numerosas cartas enviadas al Consistorio desde el año 2010, en las que pide que se habilite la zona azul en varias calles del barrio ante la presencia cada vez más constante de «gorrillas».

Igualmente, llama la atención que el anterior Gobierno local comenzó los trámites para habilitar el servicio, respondiendo así a las demandas vecinales, lo que entra en contradicción con los actuales planteamientos del PSOE. En concreto, en marzo de 2011, el entonces director general de Movilidad, Rubén García, informaba a la entidad vecinal de que «se está procediendo a la elaboración de los pliegos de prescripciones técnicas y administrativas para la licitación de un concurso abierto para la adjudicación de ese servicio municipal».

Los planes del Ayuntamiento pasan por regular un total de 7.282 plazas de aparcamiento de zona azul, de las que 3.173 son nuevas y 229 de ellas se encuentran en la Macarena, concretamente en la avenida Concejal Alberto Jiménez Becerril, Avicena, Maimónides, Procuradora Ascensión García Ortiz, Perafán de Ribera, Antonio Buero Vallejo y Doctor José Manuel Puelles.

Los vecinos creen necesario este servicio por la cercanía del albergue municipal de indigentes, ubicado en la calle Perafán de Ribera, y el Paseo Juan Carlos I, donde también transitan muchos «sin techo». Esto hace que en las calles de la Macarena sea habitual la presencia de aparcacoches ilegales, dada también la cercanía del hospital Virgen Macarena. «La cruda realidad es que los ciudadanos de a pie nos vemos perseguidos, y hasta amenazados de muerte, desde primeras horas de la mañana», sostiene Díaz. La entidad llegó a realizar una consulta «puerta a puerta» con un resultado de un 80 por ciento de vecinos a favor de la zona azul, lo que avalaría que la medida está respaldada por la mayoría de los residentes.