Cs enfría sus exigencias y da oxígeno a Díaz: «No he venido a hacer sangre»

Juan Marín opta por una actitud conciliadora y excluye del encuentro con la presidenta de la Junta para hacer balance del acuerdo de investidura su dedicación a las primarias socialistas

La presidenta de la Junta se encuentra en su momento de mayor debilidad política después de la derrota en las primarias del PSOE ante Pedro Sánchez. El camino nacional se ha cortado en seco –de momento–, por lo que su futuro está ahora encomendado a la región. De ahí que ayer la jefa del Ejecutivo, en la reunión con su grupo parlamentario, tocara a rebato para «centrarse en Andalucía. No hay ni un minuto que perder».

En este contexto, los ocho diputados de Ciudadanos se han revalorizado. Y por tanto esta formación podría tener la tentación de intentar lo que Alfredo Pérez Rubalcaba proclamó que tenía que hacer el PSOE con el Partido Popular: «Le estamos quitando las muelas sin anestesia», dijo en una entrevista radiofónica. Sin embargo, Marín opta por una actitud conciliadora. Ayer se reunió durante algo más de una hora en el Palacio de San Telmo con Díaz para evaluar la marcha del acuerdo de investidura. A la pregunta de este periódico de si había reprochado a la presidenta andaluza el posible tiempo perdido por estar ocupada en labores orgánicas, contestó: «No he venido a hacer sangre, sino a ser útil». «Veo una presidenta muy centrada en los problemas y los intereses de Andalucía». Una afirmación que para el PSOE tuvo un efecto anestesiante, toda vez que el resto de la oposición está criticando duramente que la región haya quedado como segundo plato en las aspiraciones de la líder socialista.

El máximo dirigente de Ciudadanos convocó una rueda de prensa en el mes de marzo en el Parlamento para lanzar un ultimátum a la presidenta de la Junta: o se cumplían una serie de compromisos económicos para reactivar la región como la ley de emprendimiento, la ley de Formación Profesional o la ley integral del agricultura, o retiraba el apoyo al Partido Socialista. La actitud de Marín ayer fue menos vehemente, aunque estos compromisos, al igual que otros de mayor calado para Ciudadanos, como la supresión de los aforados, la reforma de la Ley Electoral o la reducción del IRPF –en 2016 se rebajaron dos puntos, pero el compromiso es llegar al 3,5 por ciento en la legislatura– siguen en el aire. El principal acuerdo entre Marín y Díaz fue el de fijar nuevas reuniones para tratar de cerrar promesas. Concretamente, entre el 5 y el 6 de junio se producirá una reunión del comité para el seguimiento del acuerdo político en el que participará una delegación de ambos partidos políticos. Y el 14 de junio se va a constituir el grupo de trabajo sobre la reforma fiscal del IRPF. Ciudadanos espera que también se pueda dar un segundo paso en la modulación del impuesto de sucesiones y donaciones. El mínimo exento ya subió a principios de año, pero los afectados abogan por una bonificación al 99 por ciento, tal y como existe en Madrid.

Marín fió el compromiso final del PSOE a esas reuniones que están a la vista, teniendo en cuenta que, tal y como repitió en varias ocasiones, la legislatura está en su ecuador, faltan por tanto dos años para los próximos comicios de 2019 y a día de hoy el acuerdo de 69 medidas suscrito con el PSOE en junio de 2015 se ha cumplido al 66 por ciento. «Es un cumplimiento suficiente, aunque nosotros queremos el sobresaliente», deslizó Marín tras insistir en que sigue siendo necesaria la «sexta marcha» que reclamó en el mes de marzo.

La renovación de los órganos de extracción parlamentaria fue otro de los asuntos que abordaron ambos dirigentes. Ciudadanos ha insistido mucho a lo largo de la legislatura porque, al igual que Podemos, no están representados. Ni en el Consejo de Administración de la RTVA, ni en el Consultivo, ni en la Cámara de Cuentas, ni en el Defensor del Pueblo ni en el Consejo Audiovisual. El vicepresidente de la Junta viene dando fechas desde hace un año sin que ninguna se cumpla. De hecho, Jiménez Barrios apuntó que septiembre de 2016 iba a ser un mes «definitivo» para impulsar la renovación de la RTVA.

En este sentido, Juan Marín aseguró que PSOE y PP tienen ya cerrado un acuerdo sobre estos órganos. Es necesaria una mayoría cualificada de tres quintos, de ahí que entre en escena el PP. Incluso –abundó Marín– podría estar cerrado el nombre del futuro director general de la RTVA. El portavoz de la Junta, Miguel Ángel Vázquez, negó durante su intervención este extremo y contradijo al máximo dirigente de la formación naranja. «En absoluto existe un acuerdo. Según mis datos se sigue dialogando». La única medida que concretó el portavoz del Ejecutivo es que el Consejo de Gobierno aprobará el lunes de la semana próxima el proyecto de la ley de emprendimiento. El decreto de la Oficina Antifraude estará «en breve».

En líneas generales y pese a que el paquete de exigencias de Ciudadanos está por concretar con fechas precisas, esta formación salió satisfecha de una reunión que Marín calificó como «de las más serias» que ha tenido con la presidenta de la Junta. Ciudadanos queda asimismo pendiente de recibir información. Respecto a las liquidaciones sobre el Plan de Autónomos en el Presupuesto de 2016, las cifras de Cs no coinciden con las de la Junta, que se ha comprometido a evaluar la divergencia. Susana Díaz informó asimismo a Juan Marín de que la limitación de mandatos que exige Cs se ha encontrado con algunos informes jurídicos desfavorables, por lo que también están pendientes de cerrar este asunto. Según adujo el portavoz de la Junta, han trasladado al Consejo Consultivo que emita su opinión al respecto.