Cataluña

Diario de un tonto sevillano

El viernes salí de mi casa concienciado de mi bajo nivel intelectual. La ex ministra Tejerina lo había dejado claro: un niño andaluz está a dos años de un niño de León, por ejemplo. Así que un anciano de setenta y dos años como yo tiene que estar al menos a diez años luz de uno de igual edad de Salamanca. Además, para que se pueda entender este retraso, otra alta personalidad del PP lo ha dejado cristalino: los más de 6.000 millones de euros que la Junta dedica a enseñanza primaria y secundaria durante un curso se gastan en puticlubs. En mi retraso mental, propio de cualquier andaluz, no entendía muy bien que, con este aluvión de millones, cómo estos centros se encuentran ubicados en carreteras de segundo orden en polígonos, en unos edificios generalmente muy cutres, que tienen nombres como «La herradura», «La llave negra», «Lo mío no puede esperar a mañana», «Muslos ardientes», «¡Ay que calor¡», «Las niñas de las tetas en flor», «Pasión de camioneros»... Cierto es que el candidato Moreno Bonilla realizó una «performance» con todo su equipo directivo en la puerta de la sede de uno de estos negocios, el edificio era una especie de chalet agradable de familia de clase media alta. En semejante lugar nos dejaron claro dónde están lo fondos. Lo cierto es que tuvieron éxito, se convirtieron en auténticos «influencers» y el local duplicó la clientela. Pero volvamos al principio, cómo tendré la cabeza que había leído que en el curso 2017 Andalucía concentraba el mayor número de alumnos superdotados de España, he vuelto a buscar la noticia y así aparecía. Pero no debe ser cierto, cómo no iba a saber ese dato una ex ministra. Por otra parte, dando por hecho que no solo van a ir el presupuesto de educación de la Junta a los famosos locales de lucecitas rojas, no se cómo no aparece como la industria con mayores ingresos, en vez de la aeronáutica, la agricultura y el turismo. Claro que dada mi corta capacidad no es de extrañar. Pero sabido es que las malas noticias siempre vienen acompañadas. Leo en portada que Inés Arrimadas –dejar claro que a esta señora le tengo gran simpatía por su magnífico resultado en Cataluña y por su valor moral y físico para seguir viviendo en ésa que es su tierra estando rodeada de cientos de miles de fanáticos que la tienen como su peor enemiga– sostiene: «Los partidos nacionalistas creen que Cataluña es suya, al PSOE le pasa igual con Andalucía». ¡Cómo te quedas¡ En lo primero, toda la razón. No solamente creen los independentistas que Cataluña es su república, así lo declaran, así hacen referéndums ilegales, lo reafirman en el Parlamento desde el presidente al último diputado. Eso no pasa en nuestra tierra, todo lo contrario, aquí es que siempre en estos cuarenta años ha sido la lista más votada, que es lo que pretenden todos los partidos. También me produce extrañeza que la sagaz dirigente de Ciudadanos no se percatara de este problema los cerca de cuatro años que su partido ha estado apoyando a un partido que actúa como si fuese el dueño de Andalucía. Claro que reconozco que al no ser una lumbrera, como tantos millones de andaluces, no alcanzo a ver la verdad.

Como les contaba, salí el viernes con un día maravilloso. Al lado de casa tomé uno de los tramos que están abierto de la SE-40, en cinco minutos estaba en Coria del Río, magnífica autovía a la que nunca le vemos su terminación. Con mucha razón un dirigente del PP reclamaba a la Junta que presionara al Gobierno central su terminación, yo hago lo mismo, más aún viviendo en Espartinas, que con un acceso prácticamente terminado hace tiempo seguimos sufriendo los vecinos de esta población atascos innecesarios. Claro que lo estoy pidiendo ahora y los seis años que gobernó el PP, sin que sus dirigentes sevillanos pusieran mucho entusiasmo en la reclamación.

Fin de fiesta: tengo claro a quién voy a votar el 2 de diciembre: a Susana Díaz porque lo hago por simpatía personal. En las nacionales he votado al PP, no por simpatías sino por egoísmo, pensaba que mi pensión y mis pocos ahorros estarían más asegurados. En las próximas es muy posible que sea la primera vez que no vote. No me gusta Pedro Sánchez; el PP ofende mis sentimientos andaluces; Podemos, antes la muerte; y Ciudadanos para mí es la nada. ¿No piden todos falsamente claridad? Aquí tienen la mía.