Díaz destinará 147.000 euros a lograr que 75 de sus directivos ejerzan un «liderazgo efectivo»

El Ejecutivo autonómico pretende que se potencien en especial una serie de competencias de sus empleados: el compromiso con los objetivos y resultados, la innovación y la creatividad.

La presidenta de la Junta, la socialista Susana Díaz, mantuvo por decisión propia la paralización de los cursos de formación en la comunidad, después de que saltaran las alarmas de un presunto fraude que aún investigan varios juzgados de la región y una comisión parlamentaria enfrascada en hilvanar un resumen consensuado entre las conclusiones propuestas por los distintos partidos. En ese escenario, Díaz ha adelantado en varias ocasiones en el plenario de la Cámara regional, la primera vez el pasado mes de abril, la recuperación de convocatorias de nuevas subvenciones en ese ámbito. Mientras esos anuncios se materialicen para el resto, los que sí contarán con formación son directivos de la Junta, a golpe de licitación.

El contratante es el Instituto Andaluz de Administración Pública, dependiente de la Consejería de Hacienda y Administración Pública que dirige María Jesús Montero, y los beneficiarios serán un grupo de 75 de esos profesionales, 45 en Sevilla y 30 en Granada, que ocupan puestos de los niveles 26-30. El importe total de la contrata es de 146.761 euros, sin IVA, según se puede comprobar en el portal de transparencia puesto en marcha por el Gobierno andaluz. ¿Qué busca la Junta para sus directivos? Un «liderazgo efectivo». Para lograrlo los adjudicatarios del servicio deberán partir del «conocimiento de las fortalezas y debilidades» de cada uno de ellos, para luego «establecer un plan de trabajo personalizado» que deberá basarse en «el asesoramiento» individualizado y en «tres talleres para el desarrollo de sus competencias», según se establece en el pliego de prescripciones técnicas vinculado a esta contrata y consultado por este periódico. Además, en dicho documento se recoge que la empresa a la que se le asigne el servicio deberá «organizar diez talleres más para incluir a las personas que participaron en ediciones anteriores», ya que no es la primera vez que se paga este tipo de formación externa.

El Ejecutivo autonómico pretende que se potencien en especial una serie de competencias de sus empleados: el compromiso con los objetivos y resultados, la innovación y la creatividad, la influencia, la construcción y el desarrollo de relaciones, el liderazgo y la motivación, el desarrollo profesional, la capacidad para inspirar y la gestión del cambio; de acuerdo a lo recogido en la mencionada documentación.

Las actividades se llevarán a cabo en instalaciones facilitadas por el instituto de la Junta en Sevilla y Granada. La empresa seleccionada deberá, por su parte, «proporcionar la manutención a quienes asistan», así como, «los medios didácticos necesarios y adecuados» para su impartición. A ello hay que añadir que el proyecto licitado incluye la «dinamización» y la «mejora» del «entorno colaborativo virtual» de forma que éste sirva «como lugar de encuentro y apoyo a la formación, de información y de intercambio de conocimiento de todas las personas» de esos puestos.