El PSOE-A se desmarca de la IU que «nada y guarda la ropa» con Venezuela

El secretario general del Partido Comunista de Andalucía (PCA), José Manuel Mariscal, insistió ayer en el mensaje lanzado por el portavoz de IULV-CA en el Parlamento, José Antonio Castro: la democracia en Venezuela y el movimiento bolivariano son «referentes» a los que aspirar desde Andalucía y España.

Según explicó Mariscal a Ep, la ambición de «implantar» en la comunidad «el socialismo del siglo XXI» se enmarca en un discurso acordado políticamente en el seno de IU. «Son elementos centrales para nosotros el movimiento bolivariano, la democracia en Venezuela y en otros países de América Latina, el crecimiento a través de la acumulación de fuerzas y de la movilización contra el imperialismo, o la defensa de la independencia», repasó.

A golpe de retórica, el líder de los comunistas andaluces expuso que la federación considera «ejemplares» los mencionados procesos, dado que «han llevado el poder político a las capas populares desde una profundización democrática». «Ésa es la referencia que tenemos y que vamos a seguir teniendo», recalcó.

Y por si hubiera alguna duda espetó: «Los defensores mediáticos de la corrupción borbónica y los voceros de la 'Troika' no nos van a dar lecciones de democracia. Ni a nosotros ni mucho menos a Venezuela».

Usó adjetivos como bombas de relojería, de las que marcó distancia su socio de gobierno en la Junta: el PSOE-A. Ya lo hizo el martes el portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, quien recordó a la coalición que la consulta popular al modo venezolano que reclama sobre los recortes no figuraba en el acuerdo programático, antesala del Ejecutivo de coalición. A Vázquez se sumó la consejera de Presidencia, Susana Díaz, que apuntó que Andalucía tiene su propio modelo, su camino singular, y que las reflexiones de Castro sólo conciernen a IU y no «se han mantenido en ningún órgano de codecisión» del Gobierno autonómico. De hecho, Díaz subrayó que es el «modelo andaluz» el que está permitiendo a la región «cumplir con este país y con los objetivos de déficit que nos están imponiendo, sin recortar en derechos y teniendo el mayor empleo público posible», proclamó.

La dirigente socialista repitió que la comunidad cuenta con «su hoja de ruta» que evidencia que existe otra forma de hacer, distinta a la del equipo de Rajoy». Un sistema que, si por un lado, parece no ser suficiente para sus aliados; por otro, el líder de IULV-CA y vicepresidente de la Junta, Diego Valderas, cree exportable a toda Europa.

En ese sentido, desde las bases de la federación lamentan la «imagen esquizofrénica» que «se está transmitiendo a los andaluces». Una crítica a la que fuentes socialistas dan una vuelta de tuerca: «IU sabe nadar y guardar la ropa», aseveran. Mantienen que «como desde la acción de gobierno están pudiendo hacer poco, sueltan ese tipo de mensajes para contentar a sus simpatizantes». Teoría «versus» una práctica en la que «se han olvidado de los presupuestos participativos que tanto reclamaban, ahora que son Gobierno; y se han saltado por primera vez las leyes de autonomía local, que no votaron pero ahora parece que son suyas, sin escuchar siquiera a los ayuntamientos». «Los adalides del municipalismo», rematan. Otras fuentes del PSOE consultadas por LA RAZÓN son rotundos: «Lo único que le faltaba a Andalucía», ironizan, «es importar el modelo de Venezuela». Lo desarrollan: «El Ejecutivo de Chávez ha podido construir viviendas y tomar ciertas medidas sociales gracias al dinero del petróleo. Producción que vendían en buena medida al imperialista EE UU. ¿Dónde está el petróleo andaluz?», preguntan. Se quedan en el ámbito regional para citar al alcalde de Marinaleda, Juan Manuel Sánchez Gordillo, quien «vende medidas similares gracias al PER y a subvenciones estatales». El PP-A instó a Griñán a aclarar si aplicaría el modelo de Chávez para terminar con «chándal bolivariano».