La dirección nacional del PP sigue sin poner fecha para elegir candidato

La gran expectación no se correspondió con el resultado. Todas las miradas estaban puestas ayer en la Interparlamentaria que el PP-A celebró en Jaén, con la presencia de la secretaria general de la formación, María Dolores de Cospedal. Las cábalas sobre posibles candidatos y los tiempos para llevar a cabo el relevo han sido tema de intenso debate dentro de las filas del PP y fuera.

La visita de Cospedal, especialmente la reunión que mantuvo con el presidente, el secretario general del partido en Andalucía y los ocho presidentes provinciales, se esperaba que fuera un punto de inflexión. Sin embargo, el barco sigue estando en la misma playa. O al menos es el mensaje que se quiere trasladar. Ni rebelión a bordo –Málaga es la provincia más contestataria– ni encendido de los motores del relevo. La versión que ofrecen distintas fuentes presentes en el almuerzo es que ni hay nombre de candidato ni hay un horizonte preciso para acometer la designación, pese a que las miradas se dirigían a la Interparlamentaria nacional del PP que se celebrará a principios de noviembre en Córdoba. Esa fecha, según un presidente provincial consultado por este periódico, no salió ni en los entrantes ni en los postres. Los presidentes provinciales sí coincidieron en que hay que buscar una solución «pronto».

Cospedal trasladó a la dirección regional del partido que Andalucía es una prioridad, pero que la decisión de nombrar un candidato se hará cuando corresponda. Marcar una fecha concreta, según la tesis de la secretaria general del partido, constreñiría la agenda y el margen de maniobra a la hora de tomar decisiones.

Mucho, en cualquier caso, no puede esperar el PP en dar el paso al frente. La dirección andaluza trabaja con la eventualidad de que el bipartito convoque elecciones el año que viene. Ése es el discurso oficial. La realidad es que están convencidos de que Susana Díaz se sacará el as de la manga y convocará elecciones el año que viene, antes o después de las elecciones europeas de mayo. El adelanto respondería al efecto que sobre el electorado podría producir que las medidas puestas en marcha por el Gobierno central comenzaran a dar resultado, con una creación sostenida de empleo, la principal baza a la que juega el Partido Popular de cara a los próximos comicios. Esto explica que el secretario general del PP-A, José Luis Sanz, dijera el lunes en una entrevista en Onda Cero que veía «demasiado» esperar un año para nombrar candidato. Sanz, en la citada entrevista, también se defendió de críticas veladas de miembros de su partido. Aseguró que «ningún dirigente provincial coge el teléfono y me hace las críticas en persona. Tampoco se escuchan las críticas en los órganos de dirección del partido». Este periódico preguntó ayer a varios dirigentes si se daban por aludidos. Prefirieron no pronunciarse.

Además de José Luis Sanz, suenan en las quinielas otros nombres como Carmen Crespo, José Antonio Nieto, el secretario de Estado Juan Manuel Moreno Bonilla, que es la elección del sector malagueño, u otros «paracaidistas» del Gobierno central como los ministros Fátima Báñez y Miguel Arias Cañete. Esta última opción es la menos probable.

«Tienen que gobernar sin un gobierno estable»

Ni la secretaria general ni el presidente del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, se refirieron en sus discursos a la elección del candidato a la presidencia de la Junta, pero sí a los ERE fraudulentos. Cospedal afirmó que este «escándalo» hace que en la vida política andaluza «no se pueda hablar de nada en positivo», al tiempo que reclamó a los socialistas que expliquen «dónde ha ido el dinero de los parados andaluces». «Tienen un problema que han trasladado a todos los andaluces. Un problema tremendo porque tienen que gobernar sin tener un gobierno estable, con Izquierda Unida».