Andalucía

La Junta hace caja con sus impuestos propios

Solo el canon del agua y los llamados tributos ecológicos le reportaron 127 millones, un 18% más respecto a 2015

La consejera María Jesús Montero, en el Parlamento
La consejera María Jesús Montero, en el Parlamentolarazon

Solo el canon del agua y los llamados tributos ecológicos le reportaron 127 millones, un 18% más respecto a 2015

La polémica por la excesiva presión fiscal que la Junta ejerce sobre los andaluces que heredan de un familiar fallecido va en aumento. El impuesto de sucesiones y donaciones es solo uno de los siete cedidos por el Estado a las comunidades, lo que provoca amplias desigualdades por territorios –en Andalucía, su elevado coste provoca 19 renuncias de herencia al día–. Pero además, la Junta dispone de otras herramientas para incrementar sus ingresos, creadas específicamente para gravar determinados ámbitos.

El canon de mejora de infraestructuras hidráulicas es una de ellas, precisamente con el que más dinero recauda cada año. Al cierre de noviembre, las arcas públicas habían recibido 127 millones de euros durante 2016, veinte más que en la misma fecha del año anterior, según reflejan los balances de la Consejería de Hacienda y Administración Pública. Este impuesto de corte andaluz grava la utilización del agua urbana con el fin teórico de financiar las infraestructuras hidráulicas encaminadas a mejorar el servicio. Pese a nacer con uso finalista, su aplicación no se está cumpliendo, como denunciaron judicialmente en 2015 el Círculo de Empresas Andaluzas de la Construcción y Obras Públicas (Ceacop), la patronal de empresas de la construcción Fadeco Contratistas y la Asociación de Ingenieros Consultores de Andalucía (Asica). En su denuncia, lamentaban que la Junta «no ha utilizado el canon de mejora del agua y ha paralizado la construcción de depuradoras». En 2010, el Gobierno andaluz presentó un plan de 1.765 millones de euros para la construcción de obras de depuración y saneamiento «y cinco años después sólo se han invertido 59 millones», según los denunciantes. El canon del agua se incorporó a la factura en mayo de 2011 y desde entonces la Junta ha recaudado 450 millones de euros, cargados directamente a los consumidores en la factura.

Entre los tributos indirectos de la Junta figuran también los denominados impuestos ecológicos, que incluyen los derivados de emisiones gases a la atmósfera, por vertidos de aguas residuales, por depósitos de residuos peligrosos y el de las bolsas de plástico. Por estos cuatro, la Junta ingresó otros 8,4 millones hasta noviembre, un 28% más respecto a 2015. Los dos primeros son los que reportan mayores beneficios, casi ocho millones entre ambos. El impuesto sobre las bolsas de plástico de un solo uso comenzó a aplicarse en mayo de 2011. Desde esa fecha, los comercios debían cobrar las bolsas suministradas a sus clientes; el precio establecido por ley fue de diez céntimos por cada una, aunque la Junta incluye anualmente en sus Presupuestos una disposición adicional para reducirlo a cinco céntimos. En sus cinco ejercicios de vigencia, se han ingresado 2,5 millones de euros por este concepto. El año pasado, por primera vez creció la recaudación, un 18%, lo que supone un repunte del uso de bolsas no reutilizables.

Otra vía de ingresos en ascenso de las articuladas por Hacienda son los depósitos bancarios –incluidos posteriormente también a nivel estatal–. Si en 2015 sufrieron una notable caída respecto al ejercicio precedente –de 76 millones a 42–, en el último ejercicio, los cobros a bancos por los depósitos reintegrables de sus clientes crecieron un 23%. Al cierre de noviembre, la Junta había ingresado casi cincuenta millones. Este impuesto afecta a las entidades de crédito con oficinas en Andalucía y se cobra en función del saldo medio trimestral calculado.

A estos tributos directos e indirectos habría que sumar lo cobrado por tasas de las distintas consejerías y agencias públicas. Esta parcela es la única que ha sufrido una caída de casi nueve millones, quedándose en cincuenta, según los datos publicados por Hacienda.

Si se atiende a la recaudación total por todos los conceptos citados, el departamento de María Jesús Montero se embolsó 226 millones, un 10% más, quedando por contabilizar el último mes, diciembre.