Miami

Sin dragado no hay milagros

El pasado mes de agosto atracó en Sevilla el buque Azamara, el más grande recibido hasta la fecha
El pasado mes de agosto atracó en Sevilla el buque Azamara, el más grande recibido hasta la fechalarazon

Los cruceros acercaron a Málaga en 2012 a más de 650.000 turistas. A la Bahía de Cádiz, a 330.000. El destino Sevilla, único puerto fluvial de España, no puede competir con los marítimos. Aun así, el pasado año inició una fuerte apuesta por un «turismo de Primera División» que se tradujo en la visita de los dos mayores buques que han llegado al puerto hispalense, el Azamara Quest y el Azamara Journey, la proyección de un nuevo edificio terminal de cruceros en el Muelle de las Delicias o el trabajo del Ayuntamiento en la creación de un Circuito Ibérico de Cruceros y la constitución de una Red de Ciudades Atlánticas. Los resultados no han sido los esperados. La Autoridad Portuaria preveía un crecimiento de entre el 12 y el 14%. La realidad, en cambio, es que el número de cruceristas descendió un 3%. Llegaron a la capital cuatro cruceros menos que en 2011.

Detrás de este impulso que Juan Ignacio Zoido pretende dar al puerto se encuentra el desarrollo del dragado de profundización del Guadalquivir, un proyecto pendiente del dictamen final de la Unión Europea (pesa una queja de los ecologistas por los efectos que acarrearía su desarrollo en Doñana) que estaba previsto para febrero y, en cambio, no termina de anunciarse. El Partido Popular vincula al dragado, según Juan Bueno declaró la pasada semana, la creación de 20.000 puestos de trabajo, con todas las precauciones medioambientales necesarias. Entre ellos están los que generaría la instalación de las grandes líneas de cruceros en la ciudad. La zona franca sería otra de las claves.

Mientras tanto, los resultados no ofrecerán cambios significativos. Desde que el Ministerio ofrece estadísticas mensuales de cruceros, Sevilla sólo ha conseguido superar la barrera de los 20.000 turistas por la vía del Guadalquivir en una ocasión. Fue en 2009, año en el que atracaron 99 buques. Al año siguiente la cifra descendió casi un 50% y ahora trata de despegar de nuevo. La realidad, no obstante, es que en 2011 llegaron 16.058 cruceristas y el año pasado fueron 15.579, medio millar menos. En número de barcos, 57 y 53, respectivamente.

Eso sí, buenas perspectivas

Estas cifras no afectan en la planificación. La apuesta de la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento se mantiene. A lo largo de 2013 ya se han cerrado un total de 19 cruceros de lujo que traerán a la ciudad a más de 3.000 viajeros en un corto periodo de tiempo, apenas un mes. Los buques proceden de cinco compañías (Corinthian, Swean Hellenic, Croisse Europe, Royal Caribbean y Sea Dream). La noruega-americana Caribbean ha dado un paso más adelante al fijar Sevilla como punto de embarque para un crucero en Semana Santa y otro en la Feria de Abril. También repetirá en agosto y en noviembre, con destinos tan atractivos como Miami, Roma o Barcelona. Estos barcos tienen una capacidad para 700 pasajeros, toda una inyección para el turismo. Se calcula que cada crucerista deja en la ciudad 80 euros al día.

El Mercado de las Delicias, otro impulso al río

El Puerto de las Delicias prevé poner en marcha para Semana Santa un mercado «de calidad» que dará a conocer «al mundo los buenos productos gastronómicos, artesanos y de la moda de la tierra», que tras una vistosa antesala formada por puestos de flores, acogerá además una carpa para la realización de espectáculos. El presidente de Sevilla Port Market, Juan Barrero, ha indicado que el proyecto surge por la apuesta por impulsar el río Guadalquivir y un «crecimiento sostenible para todos». «Es un proyecto hecho para Sevilla y para el comercio sevillano, que contará con tarifas muy asequibles», sentencia.

En el mercado, inspirado en el de Portobello de Londres o instalaciones similares en París, se colocarán unos 60 módulos independientes.