Acuerdo con Cantabria para mejorar la calidad de vida en las zonas limítrofes

Dice el sabio refranero popular que «más vale tarde que nunca». Pues este dicho podría aplicarse perfectamente a las relaciones de Castilla y León con Cantabria, que por unas y otras cosas, o «por culpa de todos» como decía ayer el consejero de la Presidencia, José Antonio De Santiago-Juárez, no tienen ningún acuerdo o protocolo de actuación en materia sanitaria y educativa en las zonas limítrofes de ambos territorios.

Cabe recordar que nuestra Comunidad ha impulsado acuerdos de este tipo con las otras cocho regiones con las que limita en los útimos años, pero no con la comunidad cántabra. Algo que se solucionará en la primavera del próximo año, según desvelaba ayer De Santiago-Juárez en Santander, tras reunirse con su homólogo Rafael de la Sierra y con el consejero económico cántabro, Juan José Sota. De momento, los equipos de trabajo de ambos departamentos ya se han puesto manos a la obra par cerrar el protocolo de colaboración que permitiá mejorar la calidad de vida y bienestar de las personas y familias que viven y trabajan en las zonas limítrofes de ambas comunidades. «Es lo más sensato», decía el consejero de la Presidencia. Si bien, el acuerdo incluirá también otras materias de trabajo conjunto, como es el caso de la Proteción Civil o la gestión del Parque Nacional de Picos de Europa, donde ya existe una colaboración desde hace tiempo, y que con este protocolo ésta se profundizará aún más. «Las relaciones con Cantabria son necesarias e imprescindibles para prestar servicios a estas personas que viven en zonas limírtofes porque son precisamente las que cuentan con mayores dificultades de acceso a estos servicios», destacaba, por su parte, el consejero cántabro.

Autonomismo útil

De Santiago-Juárez defendía también la España de las autonomías y el autonomismo útil que persigue como objetivo, aunque reconocía que éste necesita avanzar en la mejora de la cooperación entre territorios. «Hemos crecido mucho pero mirándonos el ombligo, posibilitando así que hayamos creado barreras a los ciudadanos cuando la política tiene que ser todo lo contrario».

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