Arte, Cultura y Espectáculos

Ana Redondo logra que Valladolid muestre por primera vez en Europa la obra de Eugene Smith

La concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, presenta «Capturar la imagen», de W. Eugene Smith, junto a la comisaria de la exposición, Enrica Viganò
La concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, presenta «Capturar la imagen», de W. Eugene Smith, junto a la comisaria de la exposición, Enrica Viganòlarazon

La concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, ha logrado que Valladolid muestre por primera vez en Europa la exposición «Captura la imagen», compuesto por una selección de las imágenes del mítico fotógrafo W. Eugen Smith.

La Sala de Exposiciones de San Benito acoge, hasta el próximo 28 de agosto, esta muestra procedente de la colección particular de Christopher Luce.

La comisaria de la exposición, Enrica Viganò, señaló que «no se puede hablar de fotoperiodismo sin hablar de Eugene Smith, que ha influido en múltiples generaciones que le han tenido como referente».

Asimismo, indicó que «él pretendía transformar en imagen su verdad, y tener el proceso completo bajo su riguroso control». «La persecución de sus ideales fue su suerte y su maldición, ya que afrontaba cualquier tarea de forma obsesiva, y eso complicó muchísimo su vida y la de su familia», añadió Viganò.

Además explicó que Eugene Smith «era un artista obsesionado por la perfección, un genio de la comunicación que entró en conflicto con todos los medios de su época, especialmente con el más famoso de aquellos años; la revista Life».

La comisaria de la exposición también destacó que «inventó el ensayo fotográfico, que era un conjunto de imágenes mucho más estudiado que la simple ilustración de un artículo».

En las paredes de la Sala San Benito, a lo largo de fragmentos de diez de sus series, se suceden los retratos de hombres, mujeres y niños cuyas miradas denotan existencias gastadas, vidas duras cuyas vicisitudes han sido incapaces de doblegar la humanidad que exudan sus gestos. Cronológicamente, las primeras imágenes pertenecen a la segunda guerra mundial, con hombres encerrados en trincheras resguardándose de bombardeos, o encontrandose abandonado a su suerte a un bebé desnudo en una remota isla del océano Pacífico. Para realizar otra de las series, «Un médico rural», fechada en 1948, él llegó a decir: «Yo era como la maleta del doctor de pueblo, iba con él todo el rato y desaparecía».