Crece la economía y se confirma la salida de la recesión en la Región

Castilla y León abandona el vagón de cola. Sale de la recesión. Y lo hace, como en las mejores remontadas, con un cambio de tendencia, «de peor a mejor», al haber empezado 2013 en números rojos y abandonarlo, según apuntan todas las estadísticas, con un crecimiento intertrimestral sostenido. En el penúltimo escalón, el del tercer trimestre del año, se registró un progreso del 0,1 por ciento, algo que no ocurría desde hacía dos ejercicios completos. Así lo apuntó la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, quien destacó, no obstante, que entre julio y septiembre, se registró un una caída del 0,9 por ciento frente al mismo periodo del año anterior.

Con estas mimbres «esperanzadoras y positivas», aseguró la consejera, las estimaciones para el 2014 seguirían intactas, de cara a cumplir con un crecimiento del Producto Interior Bruto del 0,7 por ciento apuntado por la Junta, cuando los indicadores y datos de otros organismos independientes llegan hasta el 1,3 por ciento. Unas expectativas que tienen un aliado en el proyecto de Presupuestos de la Junta para el próximo ejercicio, con ayudas como las destinadas a incentivos al empresariado, estímulos o beneficios fiscales ligados al empleo. Al respecto, incidió en que «no se van a destruir puestos de trabajo y va a bajar el paro durante 2014».

En este contexto, se refirió también al crédito solicitado a partir del aumento del objetivo de déficit para este año -de 278 millones de euros- o el abono de la extra de Navidad de 2013, que servirán, explicó, para que Castilla y León tenga un cierre más positivo de año que el precedente.

Mejor comportamiento

Pilar del Olmo destacó un mejor comportamiento de todos los sectores productivos, con la única excepción del primario, con una ligera desaceleración, aunque es el único que presenta cifras positivas interanuales, con un crecimiento del 5 por ciento. Asimismo, se registró un mejor comportamiento de la demanda interna, del 0,4 por ciento, a la par que la confianza de consumidores y el índice de expectativas empresariales progresan de manera adecuada.

El capítulo industrial registró un retroceso del 2,1 por ciento en el tercer trimestre del año, inferior al del 3,7 por ciento precedente. En la construcción el desplome fue menor que en los trimestres previos (5,7 por ciento negativo en esta ocasión), mientras que los servicios contemplaban una caída del 0,7 por ciento, en el dato intertrimestral, como consecuencia de una variación anual neutra de los servicios de mercado, con un peso muy importante en la Economía castellano y leonesa, según explicó la consejera de Hacienda.

En el apartado de la demanda interna, la aportación negativa se contrajo hasta un 1,9 por ciento negativo (en el trimestre precedente fue del 2,5 por ciento), por la aportación ofrecida por los hogares (-0,3 por ciento) y las administraciones públicas (-3,4 por ciento).

En cuanto a inversiones, recogidas en la Contabilidad como formación bruta de capital, se contabilizó un descenso del 5,8 por ciento, cuando los tres meses precedentes aportaron una caída superior, del 6,7 por ciento.

En lo que atañe a la balanza comercial, el sector exterior -referido a los intercambios comerciales con otras comunidades autónomas o el extranjero- creció un 1,7 por ciento. A ello se sumó un avance en las importaciones totales, con variaciones del 0,4 por ciento.

Una rama afectada, dijo la consejera Pilar del Olmo, por «una demanda bastante tenue», la de los hogares, que «no acaba de tirar», como sí lo están haciendo las ventas a terceros países.