Donadas a la Biblioteca Nacional tres cartas íntimas enviadas por Rosa Chacel a una amiga

La Rosa Chacel más íntima llega a la Biblioteca Nacional por mediación de tres cartas que la vallisoletana envió desde Nueva York a una de sus mejores amiga, Esmeralda Almonacid. Y es que este centro ha recibido la donación de tres cartas de la escritora escritas desde la ciudad de los rascacielos, con motivo de su estancia allí por haber ganado una Beca Guggenheim.

La aportación está compuesta por tres largas cartas fechadas el 5 de diciembre de 1959, el 15 de abril de 1960 y el 12 de diciembre de 1960, escritas a máquina, con anotaciones manuscritas y que suman catorce hojas.

En ellas, la escritora le habla a su amiga de su llegada a Nueva York, de sus impresiones sobre la ciudad, de algunos lugares emblemáticos -como Central Park- y de asuntos cotidianos como la moda que se lleva en ese lado del mundo, precisa Bliblioteca Nacional en un comunicado al que ha tenido acceso este periódico. En todas ellas hace referencia a su hijo Carlos y a su marido, el pintor Timoteo Pérez Rubio, Timo, y a otros amigos comunes, como el poeta Enrique Pezzoni.

Igualmente, las hojas dejan entrever la soledad de Rosa Chacel en un país extraño, del que no domina la lengua, así como la añoranza que siente por Buenos Aires, donde había vivido tras su exilio a América del Sur y que ya sentía suyo. Estas cartas muestran a la escritora en su faceta más personal e íntima, mucho más de cómo se puede percibir en su obra.

La Biblioteca Nacional de España ya contaba entre sus fondos con ocho cartas enviadas por ella a Guillermo de la Torre y epistolarios editados entre los que destacan las cartas que escribió a Ana María Moix.