La calidad de los vinos de Castilla y León se abre paso en los mercados japoneses

Once vinos de la Comunidad participan, a partir de hoy, en el Japan Wine Challenge 2017, el más antiguo y prestigioso de Asia. Bajo el paraguas del Instituto para la Competitividad Enpresarial (ICE), la Consejería de Economía y Hacienda, busca potenciar así la asistencia a ferias internacionales para contribuir a la difusión y conocimiento de los productos castellano y leoneses, en este caso los vinos.

En concreto, compiten en el certamen seis firmas de la DO Ribera del Duero: Copaboca, con su caldo Copaboca Roble 2015; Trus, con Trus Roble 2016; 3 AsesBodegas y Viñedos, con 3 Ases Roble; Convento Oreja, que exhibe Convento Oreja Crianza 2014; dehesa Valdelaguna, con Montelaguna Selección 2012, y Malacuera, con Malacuera Ceppas Centenaria 2014. La DO Rueda estará representada por Javier Sanz Viticultor, con el vino Javier Sanz Verdejo 2016, mientras que la DO Toro acude la mano de Bodegas Viriatus, con Alboca 2016. Los vinos de la Tierra de Castilla y León optan a un galardón de la mano de dos empresas; Vega de Castilleja y Leyenda del Páramo, que presentan los caldos Vega de Castilleha 2014 y El Aprendiz 2015, respectivamente. Por último, ha viajado al país nipón, Bodegas Tampesta con Maneki 2015, de la DO Tierra de León.

Japón constituye unos de los grandes mercados del mundo. Cuenta con más de 127 millones de habitantes con un elevado poder adquisitivo. Es la tercera economía mundial por tamaño de PIB y el segundo destino asiático para las exportaciones españolas. Se trata de un país muy atractivo para las empresas, puesto que es especialmente receptivo hacia productos agroalimentarios con valor añadido como el vino, el segmento gourmet, los precocinados y los alimentos orgánicos, entre otros.

En cuanto al sector vitivinícola, Japón no es un gran productor de caldos, por lo que recurre al exterior para cubrir sus necesidades. En 2016, importó vino por valor de 1.500 millones de dólares, con España en el quinto puesto del ranking de vendedores y una cuota del 6,5 por ciento. Desde Castilla y León se vendieron vinos por valor de dos millones.