La Valladolid-Villanubla abrirá antes de verano y arranca la Zamora-Benavente

Si bien, no se debe hablar de 'brotes verdes', sí hay que referirse a un giro en los planteamientos. Los expedientes de infraestructuras parecen abandonar los cajones donde llevaban mes y hasta años y, aunque con cuentagotas, las administraciones retoman proyectos. Marzo está siendo un mes especialmente prolífico en lo que a retomar esos papeles se refiere.

Un planteamiento que ha logrado imponer la ministra de Fomento, Ana Pastor, quien ha dado instrucciones precisas para que algunas obras viarias de calado se aborden y presupuesten conforme a los plazos estipulados, de cara a agilizarlas. Lejos, claro está, quedan multimillonarias inversiones que se acometían en épocas de bonanza, pero trabajos que han demorado su planificación de manera casi desquiciante, verán por fin la luz en estos meses en Castilla y León.

Es el caso del tramo que une Valladolid con Villanubla, de la A-60 entre la capital del Pisuerga y León. «Las obras llevan el ritmo establecido», reconocía hace unos días el delegado del Gobierno en Castilla y Leon, Ramiro Ruiz Medrano. Esta plataforma, de apenas 15,3 kilómetros, se encuentra ejecutada casi en un 80 por ciento y se abrirá al tráfico antes de verano, es decir, seis años después de que se comenzara, a finales de 2007. En ella, se han gastado unos 40 millones de euros, en los que también se incluyen ramales de acceso desde varios municipios del entorno de la capital vallisoletana.

Por otra parte, y tras muchos meses de demora -con el actual y el gobierno precedente- a finales de primavera está previsto que arranquen los trabajos del tramo de la A-66, es decir la Ruta de la Plata, que unen Zamora con Benavente, el último tramo que resta para unir por vía de alta capacidad a Sevilla con Gijón y viceversa. Una obra que finalmente se acomete gracias a la cooperación público-privada. De manera que la Dirección General de Carreteras ya remitía al Boletín Oficial del Estado el acuerdo que ligará al Ejecutivo con las compañías Acciona, Contra y el fondo Meridiam (con las que firmó un acuerdo en diciembre), de manera que el presupuesto de esos 49 kilómetros lo ejecutarán esas compañías y también se encargarán de su mantenimiento y explotación durante treinta años. El montante global de la operación: 1.054 millones. Los plazos previstos apuntan a que el corredor que une norte y sur desde el oeste español estará completado a mediados de 2015. Es decir, seis años después de que se abriera el último tramo de esa infraestructura, que unía la zona Río Duero-Zamora Sur, en el entorno de la capital del Románico.

Otro tramo pendiente, el último que resta para enlazar a través de autovía con Portugal por el centro de España es el que enlaza Fuentes de Oñoro con la vía de alta capacidad lusa A-25, se licitará en breve, según avanzó el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván. Si bien, esta obra ha levantado recelo entre el empresariado local. En total siete kilómetros, que permitirán culminar la ruta europea E-80, que abandona el continente por Turquía y culmina en Irán.

Mejores conexiones

Pero, hay más obras que arrancan en este primer semestre del año. Es el caso del enlace entre Almazán y Sauquillo, en la provincia de Soria, que corresponde a la Autovía de Navarra (A-15), y que consta de 14,3 kilómetros. Sobre el mismo hablaba la subdelegada del Gobierno soriana, María José Heredia, quien comprometió la puesta en marcha del tramo durante el próximo año. Con esa infraestructura, Soria quedaría conectada con Madrid a través de la autovía del Noreste por autovía, en unas dos horas.

En Burgos, el tramo de la A-73 (Burgos-Aguilar de Campoo) entre Quintanilla de Vivar y Quintanaortuño, de casi diez kilómetros se abrirá en 2013 al tráfico, pese a los retrasos que acumula.

Mantener las vías, prioritario

El Gobierno, en un intenso mes de marzo en lo que a noticias relacionadas con el Ministerio de Fomento se refiere, también ha dado luz verde a la contratación de diversas operaciones de conservación y explotación de carreteras en Ávila, Burgos, Palencia, Salamanca, Valladolid y Zamora, por un importe de 113 millones de euros, en la Red del Estado. La más destacada es el contrato de servicios en la Autovía del Noroeste, entre Adanero y Benavente. Si bien, también se actúa en vías fundamentales en Castilla y León como la A-62 o la A-1. El último expediente aprobado, el pasado viernes, en Consejo de Ministros.