Majo apela al compromiso público para que la mujeres no abandonen los pueblos

El presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo, subrayó la responsabilidad que tienen las instituciones para conseguir alcanzar una igualdad de oportunidades para las mujeres que viven en los pueblos. «Debemos continuar con planes que posibiliten conciliar la vida laboral y la familiar o proyectos con los que realmente se llegue a conseguirla», dijo durante su intervención en la gala celebrada en Valencia de Don Juan, promovida por la institución autonómica, con motivo de la celebración del Día Mundial de la Mujer Rural.

Majo comentó en el acto celebrado en la Casa de la Cultura de la villa coyantina que frente al envejecimiento y la despoblación son necesarias políticas de información y concienciación sobre la importancia del medio rural; iniciativas, dijo, que destacando el papel de la mujer sirvan para frenar la decadencia rural, con el objetivo de cambiar las estadísticas. Pero, sobre todo, remarcó, «con el fin de cambiar una realidad que, debido a la emigración de la mujer a la ciudad, impide la estructuración de familias y reduce la natalidad».

«En nuestra mano está la posibilidad de cambiar la situación mediante la aplicación de medidas con las que alcanzar la plena igualdad de la mujer en el medio rural, así como con la ejecución de planes de desarrollo con los que crear un escenario de bienestar y calidad de vida capaz de revitalizar los pueblos de nuestra provincia», subrayó ante un nutrido auditorio.

El premio Arroba, que reconoce proyectos innovadores que primen la economía rural y sean originales, recayó en Mari Paz Díez, dedicada desde hace años a la elaboración de forma artesanal de yogures. El premio Madreña, , fue María Dolores Calvo, de 81 años, que se puso al frente de la empresa de conservas Calvo que fundó su padre. Y el tercer galardón, denominado Raíces fue para Corona Fonseca, de 81 años, por una vida dedicada al campo.