Sáez Aguado da la cara por la enfermería y defiende el trabajo tenaz de ellas y ellos

Buenas noticias para los profesionales de la enfermería. El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad velará para que la imagen de todas las personas de este sector, especialmente las enfermeras, «no sean menospreciadas en los entornos públicos», y para ello aprobará en tres meses un nuevo reglamento del Observatorio de la Imagen de la Mujer.

Así lo aseguró la ministra Dolors Montserrat, quien agradeció a los representantes de las Comunidades Autónomas, como el consejero de Sanidad de la Junta, Antonio Sáez Aguado, que hayan ante puesto los intereses de estos profesionales a los suyos.

Por su parte, el consejero puso de relieve la aprobación del Real Decreto por el que se regula la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano por parte del personal de enfermería.

Destacó en este punto, que se ha aprobado la propuesta de Castilla y León de incluir expresamente que también puedan poner vacunas sin prescripción previa de un médico en programas de vacunación motivados por razones de salud pública, tal y como ya se hizo en la última campaña de vacunación contra la gripe.

Además, apostó por instaurar «algún tipo de obligación» a los médicos después de terminar la formación especializada (MIR) «para cubrir determinados puestos cuando es una necesidad imperiosa del Sistema Nacional de Salud».

El consejero señaló que cree que se va a llegar a un acuerdo sobre cómo afrontar el déficit de profesionales en zonas de difícil desempeño, como pueblos apartados, aunque reconoció que a él le hubiera gustado ir «un poco más allá».

Sáez Aguado consideró que «no es lógico» que la Sanidad pública «haga el esfuerzo importantísimo» de formación de los médicos especialistas y que luego éstos no lo devuelvan «en forma de trabajo en el Sistema Nacional de Salud».

Así, opinó que es «ilógico» que las primeras plazas que eligen los candidatos MIR sean las de dermatología y cirugía plástica, «en algunos casos, muy orientados a trabajar en el sector privado».

Finalmente, apostó por una financiación que cubra las necesidades de los pacientes dejando a un lado criterios territoriales.