Silvia Clemente ofrece un aval a Panrico para que los trabajadores puedan cobrar

Conseguir la supervivencia de la factoría de Panrico en Valladolid. Esa es la prioridad de la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, que una vez más está poniendo todo de su parte para mediar en un conflicto laboral y conseguir que tenga un buen fin.

Tras mantener un encuentro en Valladolid con el Comité de Empresa de la fábrica, ofreció la posibilidad de «prestar un aval financiero encaminado a garantizar la negociación, y dentro de ella el pago de los salarios que se adeudan a los trabajadores», ya que ésta es su principal reivindicación. Con esta medida también se pretende facilitar la negociación del plan de reestructuración que la compañía plantea para retomar la actividad.

La reunión sirvió para que Silvia Clemente trasladara a los representantes de los trabajadores el apoyo del Gobierno Herrera, así como para informarles sobre el apoyo de carácter financiero que se puede realizar para garantizar la permanencia de la planta en la capital vallisoletana.

Y es que, la nueva dirección de esta empresa ha presentado preconcurso de acreedores y ha anunciado un plan de ajuste laboral para 1.914 empleados en toda España.

Además, la postura de la compañía es muy clara, la supervivencia pasa por un plan de reestructuración y de mejora operativa que la devuelva a la senda de los beneficios, ya que en estos momentos acumula unas pérdidas de 710 millones de euros en los últimos cuatro años.

Por este motivo, Silvia Clemente defendió que «la posible solución» pasa por un proceso de negociación, dentro del actual marco normativo laboral, que «permitan mantener el mayor número de puestos de trabajo posibles», garantizando de esta manera «una viabilidad sostenible de la empresa».

Apoyo en el pasado

La responsable regional de la cartera de Agricultura y Ganadería recordó que el pasado año, ante la situación económica de la empresa, la dirección y los trabajadores acordaron un plan de viabilidad para garantizar la continuidad de la planta de Valladolid. La compañía se comprometió a mantener la fábrica abierta, a implantar una línea para un producto nuevo y dotar a estas instalaciones de mayor carga de trabajo. Los trabajadores, por su parte, ajustaron también sus condiciones laborales.

En todo este proceso de negociación, la Consejería de Agricultura y Ganadería estuvo trabajando, tanto con la dirección de la empresa como con la representación sindical, con el objetivo de buscar soluciones y dotar a la fábrica de mayor carga de trabajo y evitar así su posible cierre. Además, la Consejería solucionó los problemas que existían en tres líneas de ayuda que tenía abiertas la compañía y concedió una nueva, para demostrar el apoyo de la Junta al proyecto.

En total, la inversión realizada desde 2004 alcanza los 11,2 millones de euros, con un apoyo del Gobierno regional de 711.153 euros. Esta cantidad por el momento, como recordó la consejera en la reunión, no se ha abonado ante la situación actual y hasta conocer los planes de futuro de esta empresa.

Todo hace indicar que las bases que se están poniendo para salvar la planta de Valladolid son sólidas, ahora está en manos de la compañía y de los trabajadores alcanzar acuerdos que satisfagan a todas las partes y evitar que la crisis económica se pueda llevar de nuestra Comunidad una empresa emblemática.