Barcelona

Albiol alienta a los unionistas a tomar la calle si hay DUI

Cree que los constitucionalistas no se han organizado lo suficientemente bien como para demostrar «su fuerza». Arremete contra el partido de Duran por primera vez en campaña con el objetivo de captar al «catalanista moderado»

El candidato por Girona, Enric Millo, toma una fotografía de Albiol con un simpatizante, ayer en Roses (Girona)
El candidato por Girona, Enric Millo, toma una fotografía de Albiol con un simpatizante, ayer en Roses (Girona)larazon

Al candidato popular a la Generalitat, Xavier Garcia Albiol, le tocó torear ayer una plaza díficil. El PP catalán tenía marcado para el sexto día de campaña la visita a Roses, en Girona, provincia en la que tradicionalmente los convergentes han barrido todos los votos y donde el independentismo ha calado con más fuerza.

El ex alcalde de Badalona llegó a este municipio del Alt Empordà dispuesto a pisar territorio. Se le dan bien las distancias cortas, salir a la calle y hablar con la gente, herencia de alcalde. Pero Roses no se prestó. El otoño se ha precipitado y sus calles, hace un mes a rebosar de turistas, ahora están desiertas. Por eso el paseo fue corto: apenas un par de bares y unos cuantos selfies –«repite, repite, que me has cortado la cabeza hombre», bromeaba con un simpatizante espontáneo el candidato más alto de la campaña, (2.02 metros). Sabe que el domingo en Badalona –donde se celebrará el acto central de la campaña– será distinto. Allí los vecinos le reconocen, le paran y le preguntan. En Girona, sin embargo, tiene que corregir a un par de niños que dudan «si es el candidato socialista». Y eso que según el barómetro del CIS es uno de los candidatos más conocidos, por delante de Iceta, Arrimadas o Romeva. Pero toda campaña que se precie tiene que contar con anécdotas de este tipo. Que se lo pregunten, si no, a Albert Rivera o «el niño de la tele», como le llaman algunos que no logran identificarlo con ningún partido.

«Votar a Unió es tirar el voto»

El candidato del PP por Girona, Enric Millo, ejerció de anfitrión de Garcia Albiol. El objetivo de los populares en esta provincia es dar un vuelvo a las quinielas que les auguran como mucho un escaño y mantener los dos con los que cuentan actualmente . Por ello Albiol se presentó en Roses como el presidente de todos, «también de los catalanistas moderados que no quieren la ruptura con España». Y por primera vez en campaña arremetió contra Unió.

El candidato popular avisó de que votar a los democristianos es «tirar el voto a la basura» porque todas las encuestas pronostican que Ramon Espadaler no entrará en el Parlament. Además, por la ley d’ Hondt, advirtió, las papeletas que apuesten por Unió acabarán favoreciendo a la candidatura de Junts pel Sí.

Desde los democristianos, la respuesta fue contundente. Defendieron que Unió es imprescindible y que no puede imaginarse una Cataluña que «en pocos años lance por la borda el capital del catalanismo político». «Apostar por el PP es echar leña al fuego contra Cataluña», apostillaron.

Las reacciones en cadena vinieron cuando el aspirante popular a presidir la Generalitat advirtió de la posibilidad de organizar su propia Diada el día 28 de septiembre en el caso de que los soberanistas iniciaran la ruptura de Cataluña con respecto a España. Si eso llegase a ocurrir, «tendríamos que salir a la calle» dijo Albiol y prometió que «él sería el primero en movilizar a la gente».

En su discurso, volvió a apelar a esa «mayoría silenciosa que se siente tan catalana como española» para que salga a manifestarse en contra de la independencia. Cree que los constitucionalistas todavía no se han organizado lo suficientemente bien como para demostrar «su fuerza» en una gran movilización, tal como hacen los independentistas cada 11 de septiembre. «A nuestros enemigos les hemos de ganar también en su terreno de juego, en las calle», consideró al respecto.

La propuesta no tardó en ser criticada desde el resto de partidos. Ciudadanos lamentó que «Albiol se plantee perder el partido de las elecciones», unas declaraciones en la línea del PSC, que dijo que «el PP se siente derrotado y piensa en qué hará si pierde». Unió declinó directamente la invitación y desde Junts pel Sí no ven capaz al ex alcalde de Badalona de movilizar a las masas.

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, respondió así al anuncio de Albiol: «Entiendo que no saben si quedarán últimos o penúltimos y esto puede provocar inquietud. No veo al PP con capacidad de hacer una gran movilización en Cataluña; si es en torno a su sede, puede ser»

Desde Catalunya Sí que es Pot fueron más allá al asegurar que «Albiol de demócrata no tiene nada» y que «con estas situaciones al PP le salen sus orígenes franquistas».

Mas pide aplazar el juicio del 9-N

Artur Mas, la consellera Irene Rigau y la exvicepresidenta Joana Ortega pidieron ayer al Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que aplace las testificales y no acuerde más diligencias en la causa del 9N hasta que les hayan tomado declaración a ellos como querellados. En un escrito, solicitan que se suspenda la declaración como testigo, prevista para el próximo lunes 21 de septiembre, en plena campaña de la directora de un instituto que denunció presiones por negarse a abrir el centro para la consulta del 9N