Transporte por carretera

Colau permitirá doblar el número de motos y bicis compartidas

La normativa finalmente aprobada eleva a 11.000 la cifra de vehículos permitidos.

La cifra de autorizaciones se revisará cada año para ajustarla a las necesidades y capacidad del espacio público
La cifra de autorizaciones se revisará cada año para ajustarla a las necesidades y capacidad del espacio públicolarazon

- El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado un decreto que regula la actividad de motos y bicicletas de uso compartido en la ciudad. La normativa, finalmente, prevé que el número de estos vehículos se pueda más que doblar respecto a los que ahora circulan por las calles de la capital catalana. En el caso de las bicicletas, el consistorio otorgará 3.975 licencias (ahora hay unas 1.500 bicis), y en el caso de las motos otorgará 6.958 (ahora hay unas 2.500).

El número total de licencias, no obstante, se revisará cada año. Cada permiso tendrá una vigencia de tres años y se podrá prorrogar por un año. Por cada vehículo, las empresas tendrán que pagar una tasa de 71,51 euros, tal como aprobó el Pleno en febrero. El concejal de Movilidad, Eloi Badia, justificó el crecimiento para «dar confianza y seguridad en el sector» y para reducir el uso del vehículo privado en la ciudad. El concejal manifestó la voluntad de que el vehículo compartido «se consolide como una alternativa de movilidad viable» y con la regulación aumente la oferta y a la vez se eviten los problemas de saturación en algunas zonas del centro de la ciudad.

Para obtener las licencias, las empresas deberán cumplir varios requisitos, como disponer de seguro, reubicar los vehículos cuando no se hayan estacionado correctamente y facilitar al Ayuntamiento la geolocalización en tiempo real de toda la flota. Una de las preocupaciones del consistorio es evitar la saturación de bicis y motos compartidas en determinadas zonas.

Límites

Por ello, se ha delimitado un área central (formada por los barrios de la Nova y la Antiga Esquerra del Eixample, Sant Antoni, la Dreta del Eixample, Sant Gervasi-Galvany, el Putxet y el Farró, la Villa de Gracia, el Camp d’en Grassot i Gràcia Nova y parte de la Sagrada Familia y el Fort Pienc) en que las empresas no podrán concentrar más del 50% de la flota durante más de dos horas consecutivas.

En el caso específico de las bicicletas, el Ayuntamiento habilitará aparcamientos exclusivos para bicis particulares y evitar así que los vehículos compartidos saturen ciertas zonas con más demanda. Los aparcamientos serán señalizados debidamente, y se prevé pintarlos de un color diferente, muy probablemente el lila.

Las sanciones por no tener la licencia pertinente o por incumplimiento de las condiciones de uso del espacio público establecidas serán de 450,76 euros.

En un comunicado, la empresa Mobike, una de las seis que ya se dedican a las bicicletas de uso compartido en Barcelona, ha felicitado al consistorio por la regulación, aunque cree que debería ser metropolitana.