El PP pide la comparecencia de los cinco «embajadores» para que rindan cuentas

BARCELONA- La figura de los cinco «embajadores» de la Generalitat es tan controvertida como desconocida. Es controvertida porque partidos como PP y Ciutadan rechazan que la Generalitat haya construido un brazo diplomático cuando ya existe la estructura estatal y es desconocida porque los delegados en el exterior apenas ofrecen destalles sobre sus tareas. Su actividad pasa despercibida porque la política exterior está centralizada por el departamento de Presidencia de la Generalitat, que maneja y distribuye toda la información relacionada con la proyección internacional. El PP quiere poner fin a esta situación y por eso ayer reclamó la comparecencia de todos ellos en el Parlament para «rendir cuentas» de su actividad.

De los «embajadores» se conoce su nombre, su sueldo (ahora inferior a los 90.000 euros anuales) y muy poco más. «Dada la opacidad del Govern para rendir cuentas de las delegaciones exteriores, consideramos que ésta es la manera de que den la cara y expliquen la verdad a todos los catalanes», afirmó en un comunicado el diputado del PP Juan Milián para justificar su petición de comparecencia, que también extendió al secretario general del Diplocat, Alber Royo. «Queremos que expliquen la verdadera tarea que realizan estos altos cargos y que hagan público el balance de todas y cada una de las delegaciones de la Generalitat en el exterior», añadió Milián.

En la actualidad, la administración autonómica cuenta con cinco «embajadas». Maryse Olivé dirige la de Francia; Josep Manuel Suárez la de Reino Unido; Mar Ortega la de Alemania; Andrew Davis la de Estados Unidos; y Pere Puig la de Bruselas.

El diputado del PP cuestionó que estas oficinas sirvan realmente para reactivar la economía y para internacionalizar las empresas catalanas, a pesar de que la Generalitat ha justificado en ocasiones su existencia con estos argumentos. «Trabajan empeñados en una agenda independentista que sólo sirve para dañar la imagen de Cataluña y perjudica las empresas catalanas», alertó Juan Milián.

El papel de ERC

Es de prever que la petición de comparecencias no salga adelante porque ERC no pondrá impedimento para aliarse con CiU en un ámbito al que concede todos sus mimos. Sin embargo, el diputado del PP quiso dirigir un mensaje a todos los grupos para que no impidan que el Parlament cite a los «embajadores».

«Este mensaje lo dirigimos especialmente a ERC, ya que su pacto de gobernabilidad se ha convertido en un pacto de ceguera, de encubrimiento del Govern y de mimetismo en las votaciones que se hace en la Cámara catalana», afirmó Milián.

El Parlament evita cifrar el coste de las delegaciones en el exterior

El Parlament de Cataluña rechazó hace pocas semanas con los votos de CiU, ERC y la CUP una moción del PP para detallar el coste de mantenimiento y funcionamiento que la Generalitat pretende destinar este años a las delegaciones que tiene en el exterior. Los partidos soberanistas también unieron sus votos para evitar la publicación de un informe trimestral sobre la actividad que se desarrolla en casa una de las «embajadas» catalanas. Asimismo, rechazaron una enmienda del PSC que pedía a la Generalitat que, antes de abrir nuevas oficinas económicas en el exterior de la agencia ACC10, estudie utilizar las oficinas comerciales de la red del Ministerio de Asuntos Exteriores, ICEX, incorporando personal de la Generalitat para garantizar la defensa de los intereses catalanes con el menor costes posible.