Videos

Hacia la Barcelona ingobernable

El CIS da la victoria a Colau, que ganaría a Trias por 11 concejales a 8 n Dibuja un pleno fragmentado con siete fuerzas y arroja un escenario de pactos difíciles de gestionar

Hacia la Barcelona ingobernable
Hacia la Barcelona ingobernablelarazon

Hace cuatro años, el nombre de Xavier Trias se hizo un hueco en los libros de historia tras poner fin a 32 años de hegemonía socialista en Barcelona. Con solo 14 concejales, de los 42 que hay en juego, a CiU le tocó gestionar la Barcelona de la crisis, de los 108.000 parados y los 50.000 «indignados», que días antes de la cita con las urnas, el 15-M, salieron a la calle para expresar su malestar con la clase política. En cuatro años, el paro ha bajado la barrera de los 100.000. Pero aquellos «indignados» han crecido exponencialmente, dando la batalla contra los desahucios –30 al día en barrios como Ciutat Meridiana–, hasta constituirse en partido.

En el partido que, hoy por hoy, según la encuesta que ayer publicó el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), horas antes de arrancar la campaña electoral, arrebataría la alcaldía a Trias.

La candidatura de izquierdas, Barcelona en Comú (BComú), que lidera la activista de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Ada Colau, ganaría las municipales en Barcelona con 11 concejales. La coalición en la que concurren partidos emergentes como Podemos o ICV, que contaba con cinco escaños en el Ayuntamiento de Barcelona, obtendría un 25,9 por ciento de los votos.

CiU, con una intención de voto del 18,5 por ciento, perdería seis concejales y se quedaría con ocho. Ciutadans, convertido en imán del voto útil contra la independencia irrumpiría en la capital catalana con seis concejales, por delante del PSC, que pasaría de segunda a cuarta fuerza, al bajar de 11 a cinco escaños. El histórico PSC, que situó a Barcelona en el mapa mundi con los JJ. OO. pierde electores en todas direcciones, hacia la izquierda (BComú), hacia el centro españolista (Ciutadans) y en menor medida hacia opciones soberanistas (ERC y la CUP).

El PP, que acusa el voto oculto, pasaría de nueve a cuatro. Mientras que la CUP también se colaría en el pleno municipal con tres ediles, robándole activos a ERC por su flanco izquierdo, que remontaría de dos a cuatro.

Con siete grupos en la sala de plenos de la Reina Regent y una variedad de mayorías imposibles por diferencias tanto ideológicas como identitarias, Barcelona corre el riesgo de ser ingobernable. Un renovado tripartito, BComú, PSC y ERC sumaría 20 concejales, con la CUP, las izquierdas llegarían a los 21 escaños que se requieren para sumar mayoría. Los partidos convencionales, CiU, PSC y PP solo alcanzan 17. Y el flanco soberanista –CiU, ERC y la CUP–, se estrella y solo suma 15.

Tomar el pulso al soberanismo

La pérdida de Barcelona supondría un duro batacazo para CiU. A su favor tiene que el 47 por ciento de los barceloneses, según el CIS, aún no tiene decidido que votará. La mitad de los encuestados asegura que tendrá como prioridad paraelegir su voto los temas de ciudad. Aunque Artur Mas, que a diferencia de Josep Antoni Duran Lleida tendrá un papel activo en la campaña de CiU, plantea las municipales como una primera vuelta del 27-S, Trias discrepa. Admite que no le conviene dar un cariz soberanista a la campaña. La ha preparado por su cuenta y ha difuminado las siglas de CiU, sobre las que pesa los recortes y escándalos de corrupción como el de los Pujol Ferrusola.

ERC también quiere desmarcarse de CiU, que tratará de mantener el tipo presentando más candidaturas que nadie, 905 –en Cataluña hay 947 municipios–. Con 715 listas en batalla, ERC que pelea con CiU por el voto soberanista quieren arrebatar el segundo puesto al PSC, que intentará resistir en el área metropolitana.