Junqueras entierra BCNWorld y redibuja un espacio de ocio con solo dos casinos

La CUP alerta de que valorará el proyecto durante el debate sobre la cuestión de confianza a Puigdemont

Han pasado cuatro años desde que Sheldon Adelson, el decimosexto hombre más rico del mundo y uno de los padrinos universales del juego, entrara en el Palau de la Generalitat para negociar si su macroproyecto de levantar un sucedáneo de Las Vegas en Europa, fuera en Madrid o Barcelona. Adelson se divirtió acentuando la tensión entre dos ciudades que siempre se han mirado de reojo. «Ganó» Madrid, entre comillas, porque el magnate acabó plantando a España por Asia. Madrid se olvidó del proyecto. Pero Cataluña, aunque Eurovegas había despertado muchos recelos, se inventó un sucedáneo que pese a construirse en Salou (Tarragona), al lado de Port Aventura, llevaba el nombre de BCN World, por aquello de que la marca Barcelona es un polo de atracción turístico. Pero BCN World, con sólo seis casinos, un espejismo de Las Vegas, seguía levantando suspicacias. Para desbloquear el proyecto, que necesitaba la bendición de ERC, se ha reducido hasta dejarlo con apenas dos casinos.

Con un espacio dedicado al juego siete veces menor que el que tenía BCN World, una rebaja del 25 por ciento de la zona edificable y un nombre con denominación de origen vinculada a Tarragona que aún está por encontrar, el vicepresidente económico presentó ayer el nuevo proyecto.

Lo hizo «in situ», en Salou, todo un gesto hacia el territorio. Y lo primero que dijo fue que «enterramos BCN World». Para referirse al nuevo proyecto de casinos, habló de Centro Recreativo y Turístico (CRT), aunque la nueva propuesta pivota sobre el turismo de convenciones, de compras, ocio y eventos, y el juego, en palabras de Junqueras, pasa a ser «residual». Para hacerse una idea, en cifras, el juego representará un 4 por ciento del techo edificable. El 96 % restante se dedicará a hoteles, turismo de negocios, centros de convenciones y zonas comerciales.

La actividad hotelera se reduce casi un 30 %. En cambio, se mantiene el espacio destinado al comercios (50.000 m2) y al ocio (120.000 m2). La Generalitat prevé una inversión privada de entre 2.000 y 2.500 millones de euros. Hard Rock, Melco y Grup Peralada son las empresas que concursarán por un casinos. El concurso se fallará durante el primer trimestre de 2017. En verano, está previsto que se inicien las obras.

Del mismo modo que el complejo se encoge, también disminuye la oferta laboral, se pasa de crear 20.000 a 10.000 puestos de trabajo. Aún y así, los alcaldes de Vila-Seca, Salou y Tarragona se felicitaron porque finalmente se haya desbloqueado el proyecto. La comisión territorial de urbanismo del Campo de Tarragona aprobó ayer por la tarde inicialemente el proyecto con 26 votos a favor y dos en contra.

No hay la misma unanimidad en el Parlament. PSC, PP y Ciutadans celebraron que vuelva a reanudarse la iniciativa mientras que Catalunya Sí que es Pot y la CUP rechazaron la nueva propuesta. Ambos señalaron que lo que se pretende es recatar unos terrenos de La Caixa que habían perdido valor. Ciutadans, pese a aplaudir que se haya desbloqueado el proyecto, lamentó que se mantenga la rebaja del impuesto al juego. El PP se preguntó qué pasa si la CUP exige la derogación del proyecto para apoyar la cuestión de confianza. Aunque no sitúa la retirada del proyecto como condición para apoyar la moción, la CUP sí valorará el nuevo BCN World en el debate de la cuestión.