Contaminación

La contaminación aumenta la mortalidad por ataque al corazón

Un estudio del Vall d’Hebron demuestra que reduciendo la polución se evitarían al menos cinco muertes al año

Los infartos en días de mayor polución son «más graves, más letales», según los estudiosos
Los infartos en días de mayor polución son «más graves, más letales», según los estudiososlarazon

Un estudio del Vall d’Hebron demuestra que reduciendo la polución se evitarían al menos cinco muertes al año.

Los altos índices de contaminación en las grandes ciudades preocupan enormemente por su repercusión directa sobre la salud de la población, razón por la cual las diferentes administraciones están promoviendo una serie de medidas destinadas a controlar la polución.

Este fenómeno se asocia a un incremento de los problemas respiratorios y a un agravamiento de las patologías relacionadas con el sistema respirartorio y las enfermedades cardiovasculares, pero ahora, un estudio, que ha llevado a cabo un equipo de expertos de Vall d’Hebron Barcelona Campus Hospitalari y el CIBER en su área de enfermedades cardiovasculares, demuestra que los días en los que los niveles de contaminación atmosférica en el área metropolitana de Barcelona son más elevados se registra un mayor número de ataques de corazón. Es decir que esos picos de contaminación podrían ser desencadenantes de infartos entre aquellas personas que presentan factores de riesgo.

En palabras del doctor Jordi Bañeras, cardiólogo del Hospital Vall d’Hebron y autor principal del estudio «la conclusión principal es que la contaminación causa un aumento de infartos de miocardio con elevación del ST, es decir, infartos con una obstrucción total de la arteria coronaria, que son los más graves».

Tal y como recuerda Bañeras, «hasta el momento solo se habían llevado a cabo siete estudios sobre la relación entre el infarto de miocardio de elevación ST y la contaminación atmosférica, con resultados dispares y controvertidos, ya que éstos no se centraban en una zona concreta de alta contaminación», pero la principal novedad que aporta ahora el estudio que él ha liderado es que por primera vez se demuestra que «los infartos de este tipo que se producen los días de más polución son más graves, más letales», especialmente en las primeras 24 horas tras el evento y que «la contaminación está también relacionada con una mayor incidencia de fibrilación ventricular»

Este estudio, que se ha publicado en la revista científica International Journal of Cardiology, parte del análisis de los datos del registro Codi IAM (Código de Infarto de Miocardio), que recopila datos de los pacientes que sufren un ataque de corazón en Cataluña, en este caso en concreto entre enero de 2010 y diciembre de 2011, para a continuación cruzarlos con los registros meteorológicos y de contaminación atmosférica en posesión del Servicio de Meteorológico y el Servicio de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña correspondientes a ese mismo periodo de tiempo.

Reducir la polución

En 2016, en el área metropolitana de Barcelona, seis de las 24 estaciones de medición superaron los valores exigidos por la legislación comunitaria en lo que se refiere a la contaminación, mientras que el doble de estaciones estuvieron cerca de alcanzar dicho límite. En este sentido, la sustancia presente en la polución más directamente relacionada con los infartos es PM 2,5, emitida por los tubos de escape de mis motores diésel de los coches. A tener en cuenta que Barcelona es hoy en día la ciudad europea con más coches matriculados por metro cuadrado.

Ante este panorama, Bañeras señala que «la contaminación aumenta en un 1,005 la probabilidad de sufrir un infarto, y pese a que esta cifra pueda parecer poco significativa, hay que tener en cuenta que su valor absoluto es grave, puesto que el 100% de la población está expuesta a esa polución». Y en esta línea, el doctor pone de relieve que «el estudio desmuestra que si se lograra reducir la contaminación en 10 unidades se evitarían 19 infartos al año». «Con una reducción de 10 µg/m3 de la concetración de PM 2,5 se podrían evitar al menos un 7,67% de las muertes que se producen en las primeras 24 horas de un infarto con elevación del ST en Barcelona, lo que supondría como mínimo una reducción de cinco muertes al año», añade el doctor.