Sants-Montjuïc

Sants calienta motores

El barrio prepara ya sus calles ante el inicio de las fiestas que inician mañana su andadura

Sants calienta motores
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Es el día más importante para el barrio de Sants. Y es que en ese día arrancará la Fiesta Major de Sants con el pregón del periodista cultural Alfred Picó Sentelles, que iniciará una celebración con 18 calles adornadas y 570 actividades programadas, la gran mayoría organizadas por las comisiones de cada una de las zonas participantes.

A la edición de este año se han unido a la tradicional fiesta dos calles más: Gayarre y Papin. De esta manera serán un total de 18 las vías ornamentadas que lucirá el barrio de Sants. Este hecho tendrá como consecuencia que se obligará a cerrar la circulación hasta que termine la fiesta, el 30 de agosto, según informó el distrito de Sants-Montjuïc.

En cuanto a la afectación al tráfico, desde el 18 hasta el 30 de agosto se ha invertido el sentido del tráfico de vehículos en las calles Ferreria (entre Almería y Guadiana), Juan Bravo (entre Vilassar y Almería) y Daoiz y Velarde (entre Tinent Flomesta y Sant Medir). Por otra parte, desde ayer y hasta el 30 de agosto, se invierte el sentido del tráfico en las calles Watt (entre Muntades y Autonomia) y Autonomia (entre Watt y Premià).

Doble sentido

También se han habilitado algunas calles con doble sentido: Comtes de Bell-lloc (entre Melcior de Palau y plaza del Centre) y Puiggarí (entre Comtes de Benlloch y Guitard).

Además, se ha previsto un dispositivo de limpieza que cuenta con 60 equipos y un total de 114 operarios que intensificarán el baldeo de plazas y calles en la madrugada con el objetivo de mantener la limpieza del barrio; y se instalarán cerca de 500 papeleras de cartón y 86 cabinas sanitarias de WC.

Para mantener la seguridad y el civismo de las celebraciones, habrá presencia permanente de agentes y patrullas mixtas de la Guardia Urbana con el cuerpo de Mossos en todas las calles.

De esta manera, Sants ya calienta sus motores para una de las citas más esperadas por los barceloneses una vez que cierran sus puertas las fiestas en el barrio de Gràcia.