...y el PP subiría hasta la tercera posición en el Ayuntamiento de Barcelona

Respecto al Ayuntamiento de Barcelona, las pasadas elecciones generales, extrapoladas al pleno municipal, supondrían un auténtico vuelco a la situación actual. De nuevo, la ausencia de la CUP desvirtúa en parte el ejercicio de política ficción pero introduce novedades interesantes. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, reeditaría su victoria pero el resto del podio cambiaría drásticamente.

De este modo, Barcelona en Comú se haría con la victoria y revalidaría sus 11 concejales. Le seguirían ERC (7), PP (6), PSC (6), CDC (5) y Ciudadanos (5). En la actualidad, Barcelona en Comú lidera el pleno municipal con 11 ediles, seguido de CiU (10), Ciudadanos (5), ERC (5), PSC (4), PP (3) y CUP (3).

Tal y como curre con el ejerciocio a nivel catalán, CDC se desplomaría y pasaría a ocupar la quinta plaza dejándose la mitad de los concejales que tiene en la actualidad por el camino. Su lugar sería ocupado por ERC que sigue al alza y se consolidaría como el primer partido independentista de Barcelona. El PSC recuperaría parte de su prestigio perdido con dos concejales más y Ciudadanos mantendría sus 5 concejales pero caería a la última posición en número de votos. El PP, por su parte, sería uno de los grandes vencedores al hacerse con una inésperada tercera posición gracias a barrios como el Eixample, Sarrià-Sant Gervasi o Les Corts. Colau, a su vez, volvería a ganar las elecciones con el mismo número de concejales. Las esperanzas de liderar una alternativa constitucionalista, sin embargo, serían escasas.

Formar un gobierno estable sería harina de otro costal, pero tampoco diferiría mucho de la situación actual. El Ayuntamiento cuenta con 40 ediles, por lo que la mayoría se sitúa en 21. Esta circunstancia obligaría a Barcelona en Comú a seguir con su política de equilibrios entre ERC y el PSC.