El fiscal pide once años para Cotino por amaños en la visita del Papa

Por impulsar «activamente» la contratación para la trama Gürtel de las pantallas y megafonía con motivo de la visita del papa a Valencia en 2006.

Delito continuado de prevaricación, malversación de caudales públicos, fraude a las administraciones públicas y cohecho pasivo. Éstos son los delitos por los que la Fiscalía Anticorrupción solicita once años de cárcel para el ex presidente de las Cortes valencianas Juan Cotino, por «impulsar activamente» y gestionar «de facto», a través de la Fundación de la Comunidad Valenciana V Encuentro Mundial de la Familia, la contratación por una empresa pantalla de la trama dirigida por Francisco Correa con todo lo relacionado para la retransmisión de la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia, en enero de 2005. En esta misma causa, la Fiscalía pide 40 años de cárcel para el entonces director de Radio Televisión Valenciana (RTVV), Pedro García Gimeno, así como 38 años y 3 meses de prisión para Correa.

En el momento de la constitución de la citada fundación, encargada de gestionar todo lo relacionado con la visita del Pontífice a Valencia, Cotino desempeñaba el cargo de Conseller de Agricultura, por lo que, según Anticorrupción, no ostentaba «formalmente ninguna responsabilidad en el patronato de la fundación», ni formaba parte de sus competencias como responsable del Departamento de Agricultura. Pese a ello, impulsó de forma activa el «grupo de trabajo» que se constituyó dentro de la citada fundación, que era donde se adoptaban las decisiones y los acuerdos acerca de la organización y contratación de los servicios y suministros que se generaban en torno a ese evento.

En este sentido, Anticorrupción sostiene que Cotino era realmente quien decidió la contratación de las pantallas gigantes y servicios de vídeo y megafonía para que los asistentes al acto pudieran ver a Benedicto XVI durante todo su recorrido. Así, junto con Pedro García», entonces director de Radio Televisión Valenciana, Francisco Correa, Álvaro Pérez, «El bigotes», y Pablo Crespo, «acordaron y planificaron de común acuerdo atribuir al ente público RTVV el encargo y el coste de la celebración de este contrato de suministro de pantallas de vídeo y magafonía y sonido».

Ello originó una adjudicación a un precio «desorbitado» de 7.493.600 euros, con el consiguiente quebranto para las arcas públicas, y, además, permitió Pedro García «sustraer fondos de la televisión pública y repartírselos con miembros del “grupo Correa”» En concreto, el ex director de la RTVV habría recibido casi medio millón de euros en comisiones.