Ayuntamientos

Catarroja cede y amplía de 3 a 4 segundos el semáforo en ámbar

La protesta vecinal por las numerosas multas sólo logra ese mínimo cambio y el Ayuntamiento se escuda en que rescindir el contrato de las cámaras costaría 800.000 euros

El pasado mes de septiembre el Ayuntamiento de Catarroja puso señales informativas para alertar a los vecinos
El pasado mes de septiembre el Ayuntamiento de Catarroja puso señales informativas para alertar a los vecinoslarazon

La protesta vecinal por las numerosas multas sólo logra ese mínimo cambio y el Ayuntamiento se escuda en que rescindir el contrato de las cámaras costaría 800.000 euros

El Ayuntamiento de Catarroja aumentará el tiempo de la luz ámbar de los semáforos de tres a cuatro segundos, de acuerdo a la postura favorable de un informe elaborado por la Policía Local y que determina que es «seguro» aumentar un segundo esta fase. Así lo decidió ayer el actual equipo de Gobierno liderado por el militante de Compromís, Jesús Monzó, para hacer frente a las quejas vecinales desde que empezaran a recibir multas, en algunos casos reiteradas, por el sistema de cámaras fotorrojo instalado en Beniparrell, Catarroja, Massanassa, Sedaví y Picanya «sin previo aviso» y por voluntad de la Mancomunitat de l’Horta Sud y del anterior equipo de Gobierno.

El escaso lapso de tiempo existente entre el cambio del color amarillo al rojo de los semáforos de la localidad ha causado estragos entre sus vecinos e incluso tensiones en algún pleno del Ayuntamiento. De hecho, en algunos casos, se acumulan hasta 13 multas, con su respectiva retirada de cuatro puntos del carné de conducir y 200 euros de sanción.

Desde esta perspectiva y para calmar los ánimos, el primer edil ha decidido alargar este tiempo pero sin superar, en ningún caso, los cuatro segundos ya que «va en contra de la seguridad vial». Asimismo, según fuentes del propio Ayuntamiento de Catarroja, está modificación, que afectará a todos los semáforos incluidos aquellos que no tengan instaladas las cámaras de control de tráfico, empezarán a lo largo de esta semana y supondrán un coste cero para las arcas del Consistorio.

Además, Monzó anunció que está prevista una reunión con la empresa encargada de gestionar el sistema de control de tráfico y de instalación de las cámaras, donde se pretende «rescindir el servicio y las condiciones económicas», aunque el primer edil y su equipo ya conocen que para poder llevar a cabo esta gestión deberá hacer frente a una indemnización de hasta 800.000 euros, una cantidad que en principio, se niega a pagar.

Así pues, el portavoz de la coalición Compromís reiteró, en numerosas ocasiones, que el contrato fue firmado por la Mancomunitat de l’Horta Sud en la anterior legislatura presidida por la entonces alcaldesa de Catarroja, Soledad Ramón. A pesar de ello, está recibiendo las críticas de los vecinos al ser su Corporación la beneficiaria del 70 por ciento de la recaudación.

El responsable de la alcaldía del municipio de l’Horta Sud que además ha solicitado un informe al nuevo presidente de la Mancomunitat, Carlos Fernández Bielsa, sobre las consecuencias de eliminar las cámaras en los cinco municipios, también contempla la posibilidad de convocar una consulta popular para que los vecinos de Catarroja decidan el futuro de las cámaras.

Mientras tanto, los afectados de las más de 11.000 multas contabilizadas desde la puesta en marcha de este sistema el pasado mes de junio, sin ningún tipo de aviso, reclaman soluciones «reales y rápidas».